Dicen que se juega más el rival porque ha de lavar la vergüenza de Mestalla, pero más cuentas ha dejado pendientes el Valencia con sus aficionados en todos estos meses como para hacer el tonto en un escenario como el antiguo Prater de Viena, donde hay que salir a ganar y demostrar que este equipo tiene hambre, juegue quien juegue. Un buen resultado allí es más importante de lo que parece por mucho que las dos grandes citas de la semana son viernes y domingo. La primera en el sorteo de Suiza, qué importante es un buen cruce para ganar tiempo y meterse de lleno en la Europa League. La otra el Athletic, a ver si es posible que Lim pueda volver algún día a Mestalla. ¿O con pasear a Mendes y Mourinho mata ahora mismo el gusanillo de fútbol?

Cantera

Neville premia a los chavales y el que salga lo hará bien, pero ojo. Además de la eliminatoria con el Chelsea y la ilusión de continuar en la Champions juvenil, a Alexanco le pueden robar de la Academia a alguno de los jugadores con más futuro de ese equipo. Una pena con lo que cuestan de criar.

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