Como era de esperar, ha tardado menos Jorge Mendes en enchufar a su cliente Nuno Espírito Santo en una banqueta de cierta altura que en ocuparse de los marrones que ambos dejaron a su amigo Peter Lim en Valencia, caso de Aderllan Santos y Abdennour. Son los dos centrales en que se gastaron gran parte de lo que el club ingresó por el central que había traído Ayala, o sea Otamendi, los dos en venta visto lo visto. Si encima le llega a colocar aquí a Julen Lopetegui, que lo intentó, la jugada le habría salido no redonda, sino lo siguiente. Aunque el súper agente sigue teniendo la llave de muchas cosas con el asunto de André Gomes, porque Mendes tiene una influencia tremenda al más alto nivel en todas las cosas que se mueven en el mercado, es evidente que en lo que respecta al Valencia ha pasado a un papel secundario. Eso es sobre todo por la capacidad de convicción de Suso García Pitarch y el empeño de la presidenta, que ha peleado para que eso sea así, aunque dejemos una pequeña parte de esos méritos a Pako Ayestaran. Todavía necesitará convencer a muchos aficionados y eso tendrá que ser una vez comience a rodar el balón, pero al propietario sí se lo ha ganado.

Cheryshev

Llega el mes de junio y ya advertía el director deportivo que el verano va a ser largo, aunque uno de los asuntos que no se va a demorar es el de Denis Cheryshev. Es un buen futbolista que ofrece rendimiento inmediato y dicen que además es buen chico y muy profesional. El Valencia fue el primero en apostar por él en el peor momento, cuando se confirmó que tenía que pasar por el quirófano, pero si al final con eso no es suficiente y elige otro destino, entonces adiós muy buenas y gracias por todo.

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