Son muchos los valencianistas que todavía recuerdan aquella carrera de Unai Emery por la banda de Mestalla después del gol que no quiero recordar, se alegran de su desgracia y más que nunca se ríen de su libro sobre la mentalidad ganadora, es lógico porque en el fútbol donde las dan llega el día en que las toman, pero al fin y al cabo esto es la Champions League y solo puede caer eliminado el que está en ella. Y el Valencia CF ni está ni, por lo que parece, tiene previsto estar por algún tiempo. Después de una temporada desastrosa en que el equipo acabó el 12 en la clasificación y fuera de Europa estamos sufriendo otra todavía peor, pero todo esto no parece alterar los niveles de exigencia en el club, que están por los suelos. Ahora resulta que el Valencia CF filtra noticias como que en su hoja de ruta, esa que no han contado al resto de los accionistas del Valencia, abonados y aficionados en general, la previsión es regresar a la Liga de Campeones en 2019, año del Centenario. Aunque si es como lo del nuevo estadio, también puede ser en 2021 y aquí no pasa nada.

No solo no hay tensión para que el equipo haga algo más que evitar el descenso ahora que casi lo tiene hecho y quedan todavía muchos partidos por delante, sino que ya sabemos que el objetivo que se marcan para la próxima temporada no es pelear por los cuatro primeros puestos, que además dan acceso directo por primera vez a la Champions. Interesante mensaje para los futbolistas que se queden y para los que vengan, por no hablar de la afición, que seguramente hará colas para sacarse el pase. Mira que hay ganas de que acierten, ya que han invertido un dinero en el Valencia, pero no dan una. Presidenta, vaya usted a dar conferencias a la FIFA, hágase fotos con Sánchez Arminio, con Rajoy y con Donald Trump cuando vayan a jugar el partido mixto a Estados Unidos, pero sobre todo venga a Valencia y explique esto a la gente, porque así en frío es impresentable.

Más artículos de opinión de Julián Montoro, aquí.