Voro González se despidió del banquillo anunciando "cambios radicales" y el Valencia CF se ha comprometido con Marcelino García a que los habrá. Veremos si tantos como Voro cree que se deberían hacer o tantos como Marcelino quiere hacer. O tantos como Mateu Alemany puede hacer. Una revolución integral en una plantilla como esta siempre es complicada por situaciones contractuales que al final tienen mala solución, aunque lo primero y principal es querer y atreverse a hacerlo. Caiga quien caiga. Más allá del papel que pùeda tener el propio Voro en las decisiones no hay un solo valencianista entre los que de verdad mandan en el Valencia, Lim, Murthy, Marcelino, Alemany o Alexanko, por eso es fundamental hacerles sentir a todos ellos la necesidad de que este club no puede continuar así una temporada más, si no peor, porque todo fue decir que habíamos aprendido de los errores pero la temporada que hemos terminado ha sido peor incluso que la anterior.

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