Tiempo después de conquistar la Copa de 2008 Ronald Koeman dijo aquello de que ese iba a ser el único título que ganaría el Valencia CF en cinco años. No había que ser muy listo para aventurar que a esta sociedad le esperaban años difíciles.

Muy podrido tiene que estar un club por dentro cuando tienes jugadores como Albiol, Marchena, Baraja, Joaquín, Mata, Silva, Villa y Morientes, quién pillara hoy a algunos de ellos, y estás para irte a segunda división más allá de haber ganado la Copa. No son cinco sino diez los años que se van a cumplir esta temporada de ese último título, diez años en los que ha habido de todo, hasta un proceso y una venta.

En todo ese tiempo hubo momentos en que el Valencia parecía volver, como ahora, a la senda que lleva a los títulos. Seguidos de duras recaídas. ¿Será esta la buena? Hay síntomas, pero hay que apostar, continuar el trabajo del verano hasta enero para mejorar lo que se puede mejorar porque los rivales para estar arriba son los que son.

Ambición como la que representa hoy el Valencia Basket en uno de los días más importantes de su historia. "Nos ha costado treinta años ser campeones de Liga y espero que no sean tantos para ser campeones de Europa", decía Juan Roig. Ahí queda eso.