"No buscamos ningún otro jugador, lo queríamos a él". Es la frase de Marcelino cuando un compañero de ´La Gazzetta dello Sport´ le pregunta por Geoffrey Kondogbia. Lógicamente el club tenía alternativas, pero lo que se dice ir, ni Krychowiak ni nada de nada, aunque no faltó quien daba al polaco prácticamente por fichado. Kondogbia, como bien saben aquellos que siguieron la actualidad el pasado verano a través de SUPER, era la gran apuesta de Marcelino, casi obsesión, aunque el fichaje era tan complicado que a veces era también difícil explicar al lector y aficionado tanto empeño. Hoy sabemos por qué, lo mismo que todos los que han venido, el francés encaja perfectamente para lo que quiere hacer el entrenador con este Valencia.

Hoy, además, ya vale más de lo que pagarán por él, porque ni siquiera hubo que pagar para traerlo aunque eso ya es mérito de quién llevó la negociación, Mateu Alemany, sin olvidar a Mendes y Cancelo, que al final la hicieron posible en estos términos. Nada es casualidad, cuando las cosas se hacen bien, los resultados llegan antes o después, en este caso ha sido causa-efecto. Apetece tanto mirar adelante que casi no nos acordamos de los dos años que hemos perdido lastimosamente.

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