Con 12 puntos de ventaja sobre el quinto el gran reto de un entrenador es mantener la máxima tensión y el cien por cien de rendimiento en todos los partidos que faltan. El Valencia CF en este sentido tiene dos apoyos importantes, diría decisivos. El entrenador quiere más y los futbolistas no solo están por la labor sino con ganas de más, como quedó demostrado en Sevilla y frente al Alavés. Este viento a favor tiene que ser suficiente para empezar a cerrar la Champions en Leganés, frente a un equipo que sí ha dicho ya prácticamente todo lo que tenía que decir esta temporada. Con todos los respetos, claro. Seguir mirando hacia arriba, al tercero y al segundo antes que al quinto y el sexto, es el camino más corto y seguro para mantener como mínimo la cuarta posición, que es innegociable. Sobre todo sto gira el futuro a corto, medio y largo plazo del Valencia CF y estos tíos no nos van a fallar. Parejo y Rodrigo, además, vuelven descansados y eufóricos después del repaso histórico a Argentina.
