Xavi Torres está en la agenda del Atlético de Madrid. La temporada que está realizando el centrocampista de Xàbia —en estos momentos la única pieza en el centro del campo con la que JIM ha contado como titular siempre que la ha tenido disponible— no está pasando inadvertida para los equipos grandes y prueba de ello es el hecho de que la entidad colchonera se haya fijado en él como posible refuerzo. De hecho todo apunta a que el club rojiblanco podría no ser su único pretendiente. El propio VCF, según ha podido saber SUPER, se planteó contratarle a finales de la pasada campaña por su reducido coste y el conocimiento que tenía de él aunque la opción finalmente se desestimó.

En el caso de la entidad colchonera ya hay informes de Xavi desde la pasada campaña cuando uno de los técnicos habituales en el palco del Ciutat de Valencia era Robert Fernández quien entonces colaboraba con Suso García Pitarch. En la actualidad, la cúpula deportiva rojiblanca es otra totalmente distinta tras cambiar este verano y entrar José Luis Pérez Caminero, movimiento que lejos de aparcar el interés lo que ha hecho ha sido meter definitivamente al futbolista en la órbita colchonera. Además, la empresa que representa al jugador tiene hilo directo con Miguel Ángel Gil Marín con quien la pasada campaña cerró la operación de Juanfran Torres.

Respecto al Valencia, aunque en su día se desestimase, cabe recordar que Braulio Vázquez estuvo el pasado fin de semana en Orriols presenciando en directo el encuentro contra el Sporting de Gijón sentado junto a Javi Garrido (también miembro de la secretaría técnica valencianista) y uno de los jugadores granotas que volvió a brillar fue Xavi.

El caso del centrocampista de Xàbia se asemeja notablemente al de Vicente Iborra quien, pese a no estar jugando ahora, también ha despertado el interés de varios equipos entre los que está el Sevilla FC como ya publicó SUPER.

Xavi Torres tiene en la actualidad 25 años y este fin de semana precisamente se medirá a su pasado. Tras formarse en las inferiores del Villarreal y pasar por el Alicante, rompió definitivamente en Can Barça donde jugó una temporada a las órdenes de Guardiola en Tercera y otra más en Segunda B llegando a debutar en Primera. De ahí se marchó al Málaga... y luego al Levante.