Pedro Botelho se escapó de la concentración del Levante en Madrid la noche del domingo al lunes tras jugar en el Santiago Bernabéu, no dio señales de vida hasta la mañana siguiente y ni siquiera regresó con la expedición a Valencia. El club, que le pidió explicaciones el pasado martes, le ha abierto expediente disciplinario y será el Consejo ahora quien decida qué sanción económica imponerle. El jugador no está apartado por el deseo del grupo en lavar los platos sucios dentro del vestuario, pero a día de hoy tiene prácticamente imposible volver a las convocatorias. Su explicación fue que su ausencia obedeció a un malentendido, ya que pensó que tenía permiso para quedarse en la capital de Españae ir al día siguiente al dentista.