Míchel Herrero, centrocampista del Levante, reconoció hoy que su equipo debe mejorar fuera de casa tras haber perdido los último cuatro partidos de Liga como visitante y apuntó que "menos mal" que como local se han mostrado más sólidos.

"Fuera de casa tenemos algo pendiente, porque no estamos ganando pero menos mal que en casa estamos fuerte. Tenemos que mejorar fuera de casa y no esperar a que nos marquen para reaccionar", dijo hoy en una rueda de prensa a la conclusión del entrenamiento.

"Siempre que vienes de una derrota tienes ganas de que llegue el siguiente partido para intentar ganar. Hay que buscar los errores para el siguiente partido, hemos visto acciones y jugadas a mejorar para que el sábado no se repita", agregó.

El futbolista valenciano reconoció que el Málaga, al que se enfrentan en Valencia este sábado, es "un rival de Champions" e insistió en que su objetivo debe ser la permanencia y "no tener prisa" por estar entre los puestos de arriba.

"El Málaga es un rival de 'Champions', muy difícil y contra el que tenemos que dar el cien por cien si queremos ganar. Está claro que si ganas te acercas más a puestos europeos pero en mente tenemos sacar los puntos necesarios rápido para salvar la categoría. No tenemos prisa por llegar a los puestos europeos", explicó.

Sobre la llegada del delantero italiano Robert Acquafresca, Míchel se mostró convencido de que les ayudará. "Aún no ha podido entrenar con nosotros, pero es muy buen refuerzo y seguro que nos va a ayudar", indicó.

Además, Míchel también se refirió al esfuerzo de su compañero Sergio Ballesteros por recuperarse cuanto antes de una lesión muscular, sufrida hace un par de semanas.

"Es una máquina, no ha tenido un día de fiesta y está haciendo un esfuerzo para poder ayudar al equipo. Está probando para ver si puede jugar el sábado. No sé si llegara pero por él no quedará", finalizó.