La llamada de Joaquín Caparrós para el amistoso en Alcoi ratifica la apuesta por Matías Aquino. Jugó más de un cuarto de hora y estuvo a punto de marcar. No fue una decisión casual, es un fijo en las jornadas de tecnificación, marcó tres tantos en pretemporada con el filial, es la referencia del División de Honor con cuatro dianas y el cuerpo técnico del utrerano ya lo ha visto en acción en más de una ocasión. Todavía le queda un año de juvenil, pero el club es consciente de su potencial, tanto que ayer David Salavert, máximo responsable de la escuela, siempre con el consentimiento de sus ´superiores´ de la dirección deportiva, se reunió con sus representantes para trazar el plan a seguir con el ´niño´ de Caparrós.

Que el cónclave se produjera tras sus primeros minutos con los ´mayores´, aunque fuera en un amistoso ante el Alcoyano, es el dato más anecdótico. Desde que Matías aterrizara en el verano de 2012 de Valladolid, el club y el entorno del jugador han ido cogidos de la mano, siempre paso a paso, para ir puliendo el panorama del jugador en Orriols. Fue un cara a cara satisfactorio, que refrendó la confianza en el pequeño de la saga Aquino e igualmente se activó un proyecto deportivo para que su progresión no se corte de sopetón. Hay dos bases definidas: su continuidad en el club, sin apresurar su presencia en la primera plantilla, por mucho que Caparrós haya dado muestras reales de confianza, y potenciar otros detalles como la alimentación. El objetivo es paralizar su tendencia innata a ganar peso para potenciar sus movimientos y su facilidad para la finalización de las jugadas.

Ya se ha trazado un primer esbozo para hacerle un nuevo contrato a Matías, rompiendo la tendencia de los dos años unilaterales que todo juvenil tiene cuando concluye esta etapa de formación. En el caso del pequeño ´Torito´ aún le quedará un año más tras el 30 de junio. Ahora roza la mayoría de edad y las dos partes en la negociación son conscientes de que con un trabajo paralelo durante tres o cuatro años, Aquino se convertirá en más realidad si cabe. El blindaje está marcha. Es una muestra de reconocimiento, siempre buscando su desarrollo escalonado en Orriols.

Su sitio en estos momentos es el División de Honor, donde marca las diferencias y no solamente por los cuatro tantos que lleva en su cuenta particular. No pudo jugar en la primera jornada ante el Tavernes Blanques porque arrastraba ciclo de amarillas de la temporada pasada en Liga Nacional, tampoco estuvo contra Huracán por lesión y debutó ante el Albacete. José Gómez lo ha llamado más de una vez para entrenamientos y su crecimiento en el club granota lo marcará su rendimiento, sin exigencias. En el intercambio inicial de buenas intenciones para blindar al ´Mati´, todavía no está fijado el número de temporadas, ni cuando daría el salto a la primera plantilla, porque la premisa obligatoria es no dar pasos en falsos en el crecimiento de Aquino. Es un planteamiento consensuado de presente y futuro.

Ayer, junto a sus compañeros del Juvenil A, asistió a una sesión de comunicación en Buñol. En la sala de prensa de la Ciudad Deportiva recibió algunas indicaciones y consejos para afrontar diversas situaciones relacionadas con los medios. Otro paso más en la formación de la nueva joya de la factoría.