Javier Aguirre, entrenador del Espanyol, afirmó hoy, tras caer derrotado su equipo en el estadio Ciutat de València ante el Levante por 3-0, que el primer gol del equipo local les sacó del partido, lo que no desmerece el triunfo de su rival.

"Ese gol, en un penalti que fue fuera del área, nos hizo mucho daño y, mientras estábamos desconectados, nos llegó el 2-0, algo que contra el Levante es muy difícil de remontar. Además, al principio de la segunda parte, cayó el tercero y todo pasó a ser todavía más complicado", agregó.

Pese a ello, se mostró satisfecho con el trabajo del equipo, aunque admitió que cometieron un error, aunque hicieron lo que habían trabajado.

"Hemos utilizado ya veintitrés jugadores y estoy contento. Somos un equipo más de la Liga española que ganamos y perdemos en una Liga que está rara y que tiene mucha igualdad", indicó.

Aguirre no desveló la conversación que tuvo con el árbitro del partido, César Muñiz Fernández, al acabar el encuentro. "Lo que se habla en el campo, allí se queda", concluyó.