El excentrocampista del Zaragoza, recién desvinculado del Colorado Rapids de la MLS, sigue siendo la primera alternativa al ´Gato´ Silva, que ha perdido muchos enteros por el riesgo burocrático que su fichaje implicaría para el Levante. Jose Mari, que llegó a un acuerdo con la Liga estadounidense para poner fin a su aventura aun teniendo contrato en vigor, está a la espera de movimientos, ya que desde Orriols se ha sondeado su situación pero no hay oferta ni una decisión definitiva al respecto. El regreso de Lucas Alcaraz a València tras las vacaciones de Navidad puede provocar un nuevo encuentro de trabajo con Manolo Salvador y Quico Catalán para avanzar tanto en este posible refuerzo como en el de Oriol.

El Levante sondea a Jose Mari

A la espera del pistoletazo de salida, el Levante sigue a lo suyo para llegar bien colocado al inicio del mercado de invierno. En la medida que se pueda, sobre todo con el mediocentro por la inminente marcha a la Copa de África de Diop, el objetivo a diferencia de otras temporadas es que los refuerzos no sean de última hora, sino que lleguen lo más pronto posible para ayudar en un mes con un calendario de aupa y lleno de compromisos entre Liga y Copa. Por ese motivo, y sin olvidar la reunión sobre el tema que tuvieron antes de las vacaciones de Navidad el presidente, el director deportivo y el entrenador, en la mesa no sólo están los objetivos prioritarios de Oriol Riera y Silva.

Y es que los problemas burocráticos para el fichaje del ´Gato´ Silva han empujado al Levante a abrir el abanico de candidatos para el mediocentro. Pese a que el chileno no está descartado, el club está estudiando varias de las alternativas que desde hace unas semanas tiene encima de la mesa y entre las que por encima de distintos centrocampisras de Ligas extranjeras destaca el exzaragocista José Mari. Un futbolista sin una trayectoria dilatada en Primera pero conocedor de la competición y que se perfila como una salida al posible descarte del ´Gato´, por el que el Brujas tampoco parece estar tan por la labor de cortar la cesión con Osasuna como parecía.

Nacido en Rota y ex, entre otros, del Sanluqueño, Murcia B, Jaén y filial del Zaragoza, José Mari se encuentra libre, por lo que podría llegar a Orriols gratis, lo que lo convierte en una opción siempre interesante para los granotas. Afincado de nuevo en España, acaba de desvincularse del Colorado Rapids, de la MLS estadounidense, el equipo del Piojo López. Desde el pasado febrero, cuando cruzó el charco tras rescindir en La Romareda, ha jugado allí 20 partidos y marcado 4 goles. Sin embargo, su objetivo es volver a la Liga, donde tiene varias opciones en el mercado de invierno.

Sin oferta desde Orriols

A expensas de posibles acontecimientos, el Levante no le ha trasladado ninguna propuesta oficial por el momento, aunque está al día de su situación y lo tiene controlado por si en los próximos días decide abordar su contratación. El propio Lucas Alcaraz, que comparte agente con él en la figura de Rafael Rodríguez ´Rafita´, tiene buenas referencias suyas y ha intercambiado información con Manolo Salvador, que en sus últimos viajes por Europa también ha recopilado informes de futbolistas con perfiles similares aunque con el inconveniente de tener que acoplarse rápido a la Liga. A sus 27 años, en principio no tendría esa pega, aunque la idea de los granotas es no vincularse con ninguno de los fichajes invernales más allá del final de temporada, por lo que sobre el papel prefiere estudiar cesiones o un contrato sólo hasta junio. Hay que tener en cuenta, eso sí, que el modus operandi de Manolo es el de no imponer jugadores al entrenador, todavía menos en un periodo tan concreto como es este.

El Zaragoza le abrió a Jose Mari la puerta de salida a principios de año a pesar de que había empezado acumulando partidos, pero su situación acabó siendo insostenible, descartado deportivamente y con el handicap añadido de haber presentado una denuncia en AFE.

Centrocampista fuerte y de perfil defensivo, Jose Mari recaló en tierras aragonesas procedene del Jaén. En su primer año se ganó la confianza de Manolo Jiménez y jugó 24 partidos, aunque se vio arrastrado por el descenso. Ahora, después de un periodo de 10 meses, ha dado por concluida su aventura americana, en la que un gol suyo estuvo entre los candidatos al mejor de la temporada. Su objetivo es no tener que marcharse otra vez de España.