La espera continúa. El Levante se acostó en la noche del lunes un día más con la incertidumbre de si Bryan Ruiz podrá o no defender sus colores lo que resta de temporada. La FIFA -y como intermediaria, la Federación Española- estudiaba qué respuesta definitiva da a la solicitud enviada por el club granota a primera hora. El Fulham inicialmente se equivocó en la fecha de final de la cesión del tico, ya que puso junio de 2016 en lugar de 2015, y la rectificación llegó apenas unos segundos más tarde de que se produjera el cierre automático del TMS (Transfer Matching System) a las doce en punto de la noche del pasado viernes. «Estamos pendientes de que nos contesten. Estamos esperando que tomen una resolución, que decidan... está todo explicado (a la FIFA), saben cómo ha sido todo y estamos esperando», aseguraba el vicepresidente Tomás Pérez al diario costarricense La Nación. En la presentación oficial de Kalu Uche y Ramis, el propio Quico Catalán habló de «un minuto» de atraso en la inscripción original. «Es tan sencillo que a la hora de meter la documentación, los datos de la operación, de la transferencia están metidos, pero los contratos llegan fuera de plazo, aunque sea un minuto, y a efecto del TSM eso te impide que lo tramite en el mismo momento y que no pueda darse por buena esa transferencia. Si te equivocas en un dato y no correlacionas en tiempo y forma se demora. Los contratos por parte del Fulham llegan cuando llegan. Un minuto está decidiendo un fichaje, es triste, pero es así».