El Levante UD presentará esta tarde el escrito por Iván Ramis ante el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD), ratificándose en el recurso planteado contra la resolución del Comité de Apelación. El TAD acordó conceder la suspensión cautelar solicitada para que pudiera jugar el Rayo Vallecano tras ser expulsado en la jornada 24 ante el Granada CF por roja directa y que el Comité de Competición acordara suspender con cuatro encuentros al central mallorquín.

«Confío en que no me sancionen porque en el vídeo se vio que no había ninguna agresión, ningún insulto, que no hubo nada y que la rectificación fue buena para nosotros», dijo el central, que a la espera de una resolución definitiva ha disputado los dos partidos siguientes al rifirrafe con El Arabi que le costó una expulsión.

Tras recibir la oportuna notificación, el Levante tenía desde ayer 10 días para presentar nuevas alegaciones, aunque se debatía entre si hacerlo ya o esperar. Y es que el TAD se reunirá este viernes pero sin la obligación de abordar el asunto de Ramis, que igual puede hacerlo como que no. El objetivo en Orriols es que la tarjeta roja se convierta en amarilla, aunque en ese supuesto se quedaría a una de cumplir ciclo, por lo que podría ser baja contra el Celta si juega en el Santiago Bernabéu y es amonestado. Otra posibilidad es que el TAD ratifique la roja, por lo que no podría jugar el siguiente partido. Lo ideal para los granotas sería que si Ramis tiene que quedarse fuera lo hiciera contra el Madrid, aunque en el club no quieren que el TAD interprete que lo que se está buscando es una sanción a la carta.

Ramis admitió que si tuviera que cumplir la sanción esta jornada sería un buen momento para hacerlo: «Hay mucho que ganar y poco que perder pero si lo puedo jugar, lo quiero hacer para ayudar a puntuar», dijo el mallorquín, que confesó que cuando le comunicaron la primera sanción no se lo creyó. «Creía que era una broma cuando me lo dijo el delegado. No me lo podía creer, pero incluso un partido me parece injusto. Creo que el árbitro se puede equivocar, que no ve la jugada y nos saca roja sin verla».

«En partidos tan intensos creo que los árbitros deberían mantener un poco más la calma», abundó Ramis, que desde su llegada sale a tarjeta por falta. «Cuatro tarjetas que llevo son injustas», confirmó el que junto a Uche se ha convertido en el mejor fichaje invernal, asentado en el once titular y todavía con margen de mejora para «rendir más». «El vestuario es de diez. Queremos conseguir la permanencia lo antes posible pero vamos partido a partido. En los últimos en casa hemos tenido que remontar pero el equipo en ningún momento baja los brazos, eso es lo importante», dijo.