Sin ser los mil millones de euros que un ‘movimiento de indignados’ reclamaba en verano a la FIFA por su arbitraje en el Brasil-Colombia de cuartos del Mundial, Velasco Carballo ha generado un evidente perjuicio a los granotas esta campaña. Sus decisiones penalizaron al equipo en el Pizjuán y Elx, por lo que no se entiende su designación para la visita del Sevilla del día 7. Con la permanencia en juego, en el Levante no ha sentado bien la misma, que se dio a conocer ayer, y más después de su última actuación estelar: el pasado fin de semana expulsó a tres jugadores del Córdoba, cuyo presidente reclamaría públicamente control antidopaje a los colegiados como respuesta.

Por suerte, el choque frente a los de Emery se jugará en el Ciutat, donde Velasco ya vivió el 2-0 del Derbi del pasado año. De 12 encuentros que les ha pitado como visitantes a lo largo de su carrera, los azulgranas no han ganado ninguno. El dato habla por sí solo, como también las seis tarjetas que les sacó en la primera vuelta ante los hispalenses, tras cometer solo 10 faltas; los locales serían solo dos veces amonestados a pesar de haber realizado trece infracciones.

En el Pizjuán, Velasco pasó por alto un empujón de Vitolo a Vyntra en el 1-0, así como dos penaltis cometidos sobre Ivanschitz y Casadesús en la primera mitad. Aún es más recordado en Orriols el tiempo de descuento que concedió, cuando los locales se lanzaron en busca del gol del triunfo. Además de agónicos, aquellos nueve minutos de prolongación fueron injustificables, por «muy largo» que los granotas hubieran hecho la contienda en palabras del técnico del Sevilla.

Incluso Alcaraz tiene su particular historia de desencuentros con el madrileño de anteriores etapas en el banquillo. Por eso ya puso el grito en el cielo con lo sucedido en terreno andaluz, y volvería hacerlo el 18 de enero en el Martínez Valero. En un duelo ante un rival directo por la permanencia, como el Elche, el trencilla dejó en inferioridad a los granotas a los seis minutos. «No es injusto pero no es lo habitual. Estamos acostumbrados a ver encuentros donde hay muchas acciones parecidas a esa —en alusión al manotazo de Navarro a Pelegrín— y no es roja ni de lejos», destacaba el granadino al final: «Yo no he visto la acción, pero David me cuenta que el árbitro le ha dicho a él al descanso que se ha precipitado al expulsarlo».

Lo más sangrante es que aquella no fue la única decisión de Velasco que perjudicó ese día a los azulgranas. Estos vieron poco después como el madrileño pitaba un inexistente penalti de Vyntra, parado después por Mariño. «Este es el mismo árbitro que en Sevilla dio nueve minutos de descuento, y aquí ha dado tres y ha pitado a los dos minutos y 50 segundos», recordaría irónicamente Lucas, para enfatizar que los suyos habían visto mermadas así sus opciones de lograr un empate.

De los que más pita al Levante

Su designación ante el Sevilla convierte al colegiado internacional en uno de los cuatro que más veces se ha cruzado este curso con el Levante, a pesar de los precedentes negativos. Pérez Montero, Álvarez Izquierdo y Fernández Borbalán también se han cruzado con los granotas en tres ocasiones. Solo una lo ha hecho González González, encargado de impartir justicia en Almería, cuyo recuerdo más reciente no es demasiado halagüeño tampoco: 0-5 al Barça con rigurosa roja a Vyntra a la media hora.