El Levante todavía no se ha asegurado su permanencia una temporada más en la Liga BBVA, pero el punto obtenido frente al Atlético de Madrid el pasado domingo deja al cuadro granota con un pie y medio en la máxima categoría del fútbol español, permitiéndole incluso poder empezar a pensar en la planificación de la próxima temporada. Un trabajo que el Levante siempre ha dejado para cuando tiene asegurado su objetivo, y que tampoco va a cambiar ahora, por lo que pese a los posibles intereses en jugadores, no habrá nada oficial hasta el final de la temporada.

Uno de los nombres que ha sonado con más fuerza desde hace meses es el del centrocampista del Almería Verza. Un futbolista cuyo perfil encaja a la perfección en el conjunto de Orriols, que acaba contrato con su actual equipo y que lleva en la cartera de Manolo Salvador bastante tiempo. La dirección deportiva granota le ha seguido muy de cerca durante esta temporada, yendo a verle en directo en varios encuentros, pero su llegada a Orriols, aunque es posible, está aún en compás de espera.

Pese a que la posición de mediocentro no es una prioridad a reforzar por parte del club, la opción de Verza es muy atractiva por el hecho de que termina contrato, un nicho de mercado al que el Levante está muy atento todas las temporadas. Su llegada sería, por tanto, a coste cero, y eso cambia por completo la perspectiva de su fichaje. Novias no le faltan, pues ya se le ha relacionado con equipos como el Granada, pero el Levante tiene varios puntos a su favor a la hora de negociar su contrato.

El primero de ellos es la opción de ofrecerle una relación contractual de larga duración, sobre las tres temporadas, algo muy a tener en cuenta para un futbolista que comenzará el curso que viene con 29 años. El segundo, y quizá más importante, es el hecho de poder volver a casa, o al menos más cerca de ella, pues Verza es natural de la localidad alicantina de Orihuela.

Todo un especialista

Verza se formó en la cantera del Villarreal, donde fue uno de los futbolistas más destacados de su generación junto a César Arzo, Héctor Font, Xisco Nadal o Jonathan Pereira, entre otros. Participó en todas las categorías inferiores de la selección española y debutó en Primera y en Champions con el Submarino. Sin embargo, de ahí pasó al Recreativo de Huelva y al Córdoba, donde tras no triunfar regresó a su Orihuela natal. Ahí volvió a destacar y firmó por el Albacete previo paso al Almería. En tierras andaluzas es donde ha terminado de explotar, consolidándose como un jugador de Primera División con todas las letras, pues en sus daños completos en la máxima categoría ha jugado 66 partidos, todos ellos como titular.

Es un jugador sobrio, típico del centro del campo, pero con una marca personal. Los penaltis. Es uno de los mejores expertos de España en el lanzamiento de los once metros y tiene una fiabilidad enorme, pues solo ha fallado uno de once que ha tirado en dos años y, curiosamente, siempre que ha marcado desde el punto fatídico, su equipo ha ganado o empatado.

La llegada de Verza a Orriols está directamente relacionada con los futuros de Sissoko y Diop, a día de hoy en el aire. Con el primero se han mantenido conversaciones para estudiar su situación, pero las pocas oportunidades que ha tenido con Alcaraz -salvo el otro día ante el Atlético donde fue de los mejores- hacen dudar a la dirección deportiva. En el caso de Pape, pese a que el club le mantiene la oferta de renovación, cada vez son mayores las sospechas de que el senegalés podría haberse comprometido ya con otro equipo de la Liga BBVA, concretamente el Espanyol, por lo que en el club tienen casi asumido que habrá que encontrarle recambio.