Mientras en Os Belenenses maldicen el vacío que ha dejado en la plantilla después de su marcha, que podría ser cubierto por dos jugadores, en Orriols acapara buenas palabras. Compañeros, técnicos y hasta el presidente avalan a Deyverson, cuyo fichaje se ha convertido en el más caro con diferencia de la ‘era Quico Catalán’. El futbolista brasileño lleva una semana escasa como granota pero ya ha tenido para exponer su potencial en Holanda; en los dos amistosos en los que ha jugado y sobre todo en los entrenamientos.

El cuarto y por ahora último refuerzo del conjunto azulgrana no ha marcado, aunque golear sea uno de los principales objetivos de su llegada. No obstante, fue el miembro de la plantilla que más tantos consiguió el pasado curso en competición oficial: ocho en Portugal y uno con el Colonia, para sumar nueve. Contra el NEC no tuvo opciones de ver portería, al contrario de lo que había sucedido a su salida en la recta final frente al Bayer. Un gesto técnico, en un control, le había bastado en su estreno para generarse una ocasión, que terminaría abortando la zaga alemana, a pesar de que los de Alcaraz jugaban en inferioridad numérica.

Entre sus cualidades, la que más ha llamado la atención es su capacidad de salto. Tanto por esta como por su altura (1,89 metros), su incorporación enriquece al equipo en el juego aéreo, que en meses anteriores acaparaban prácticamente Casadesús y Simao. También se presenta como un complemento perfecto para las cualidades de Ghilas, la otra cara nueva de la delantera, más acostumbrado a pedir el balón al hueco o a combinar de espaldas a portería.

Hasta ahora no ha tenido la oportunidad de compartir ataque en un amistoso con el argelino, como tampoco con Casadesús. En su proceso de adaptación disputó 24 minutos contra el Leverkusen y una hora frente al NEC. El jueves, contra el Villarreal, tendrá una nueva oportunidad de acoplarse al estilo de juego azulgrana. Este es acorde con sus características; además de remate cuenta con velocidad para explotar el contragolpe. Quienes comparten desde el pasado lunes vestuario con él destacan igualmente su pragmatismo sobre el terreno de juego, más que su estética.

Un brasileño "tranquilo"

A nivel personal, ha sido acogido rápidamente por el grupo, en el que se ha revelado como una persona de carácter tranquilo. Deyverson no encaja en el esquema clásico de jugador brasileño; desde que acabara su etapa juvenil ha desarrollado su carrera en Portugal (Benfica B y os Belenenses), exceptuando los seis primeros meses de 2015 en Colonia. Su perfil fuera del campo se asemeja mucho al de Rafael Martins, con el que ha mecho buenas migas en Ermelo; curiosamente, su llegada coloca al ex de Vitória de Setúbal en la rampa de salida. No entra en los planes de Alcaraz, que ha dejado clara su postura dejándole inédito durante los tres amistosos disputados en la concentración en tierras holandesas. El Zhar y Xumetra, en idéntica situación.