El nombre del día en el capítulo de salidas fue el de uno de los capitanes: David Navarro. Pese a estar todo el verano en la cuerda floja, a última hora llegó una propuesta firme del Las Palmas que hizo dudar al central. Su suplencia el pasado domingo, curiosamente en Gran Canaria, pese a la sanción de cuatro partidos de Simao Mate y los tres centrales en liza, con Feddal de titular por primera vez, fue la confirmación de un secreto a voces: para Alcaraz es un jugador prescindible. Fuera de los planes del técnico granadino, el club estaba dispuesto a facilitarle una salida, lo que dejó su continuidad en el aire toda la jornada, pero el de Port de Sagunt optó al final por cumplir su contrato. El Eibar de José Luis Mendilibar también sondeó su situación en los últimos días. Es más, en previsión de su posible adiós, el club reactivó posibles operaciones con centrales, sobre todo desde el momento en el que se planteó la posibilidad de fichar a Christian Maidana. Navarro confía en que su situación cambie y que pueda recuperar su rol dentro del equipo, aunque igualmente es consciente de la rémora que arrastra por su escaso protagonismo desde que empezó el año. Condicionado por su expulsión ante el Elche en enero y la dolorosa goleada en Vallecas, la derrota contra el Celta el 21 de marzo marcó su salida del once hasta el último encuentro de Liga contra el Elche, ya sin nada en juego, con la permanencia en el bolsillo.

Los deseos de darle una vuelta de tuerca casi completa a la zaga han hecho que Manolo Salvador, con Feddal y Trujillo ya en plantilla, contemplara la posibilidad de incorporar a un tercer efectivo que aumentara más el nivel. Y es que los problemas en defensa, los malos registros de la pasada temporada y el engranaje de cinco defensas, han estado muy presentes hasta el último día del mercado estival.

Del resto de descartes no hubo apenas historia. Solamente la salida como cedido de Jason, que tendrá en el Carlos Belmonte de Albacete la oportunidad de foguearse en el ‘ámbito LFP’ tras apenas contar con oportunidades a partir de su repesca desde el Villarreal B. No terminó de dar el paso Xumetra, nuevamente al borde de comprometerse con otro equipo, ni tampoco Nikos Karampelas o Jesús Fernández, cuyo papel en el equipo será todavía más testimonial tras el fichaje de Mariño por tres temporadas. La plantilla queda cerrada en 23 futbolistas, con jugadores como Jesús, Nikos, Pedro López, Xumetra e incluso David Navarro conscientes de que parten en una posición retrasada en la pelea por ser uno de los once elegidos de Lucas Alcaraz.