A las 10:10 de la mañana, acompañado de su cuerpo técnico, Lucas Alcaraz llegó a Buñol para despedirse de la plantilla en la intimidad del vestuario. Poco más de un cuarto de hora después se marchó de la Ciudad Deportiva sin hacer declaraciones e intercambiando abrazos y buenos deseos. Aunque este adiós fue menos efusivo que el de Mendilibar.

Pocos minutos después de que Lucas Alcaraz abandonara la ciudad deportiva de Buñol, llegó el presidente del Levante UD, Quico Catalán, acompañado por el directo deportivo, Manolo Salvador, el consejero del club Miguel Ángel Ruiz y el director de comunicación Alberto Gil. El presidente se ha reunido con los jugadores, unos minutos antes de que Miguel Ángel Villafaina, técnico del Atlético Levante, empezara a dirigir la sesión de entrenamiento de este lunes.

Villafaina cumple su décima campaña en el Levante y la segunda a cargo del filial, que actualmente ocupa la décimo tercera posición en el Grupo III de Segunda B.

El entrenador ha dirigido una sesión en la que los jugadores que el domingo disputaron más minutos en el choque ante la Real Sociedad han realizado un trabajo más suave que el del resto de sus compañeros.

Tras anunciar la destitución de Alcaraz el domingo por la noche, Catalán, presidente del club, aseguró que Salvador aún no les había comunicado su propuesta para hacerse cargo del equipo, por lo que no pudo poner una fecha a su incorporación.

El siguiente compromiso del equipo tendrá lugar el sábado en la décima jornada de la Liga con la visita al Valencia CF en el derbi de la ciudad en un partido al que el Levante llega como colista de la clasificación.