Pues sí que ha sido negro este dichoso viernes para el Levante, que ha dejado escapar una oportunidad única frente al Betis de reconfirmar la mejoría experimentada con Rubi y a la vez salir de los puestos de descenso.

Apoyado en la infalibilidad de Rubén Castro y en la madera, que por tres veces ha evitado que los granotas marcasen, Betis se ha llevado por delante los puntos. Pero, sobre todo, las ilusiones generadas por la goleada en El Molinón. Los azulgranas no solo han perdido el partido, sino cierta claridad de ideas respecto al partido de Gijón; se han alimentado principalmente de orgullo, errores defensivos béticos y el aliento de la grada, que les ha despedido entre aplausos.

Los visitantes han golpeado a los cuatro minutos y donde más podía doler. A balón parado, la principal baza ofensiva granota, es como los de Mel han anotado el que a la postre ha sido el único gol de la noche. Rubén ha aprovechado la laxitud en la marca para materializar un córner sacado a la corta: ha colado el balón junto al palo, lejos del alcance del portero local. A partir de ahí, su homónimo, Martínez de apellido, ha sabido leer las aproximaciones béticas y abortarlas, pero no ha sido suficientes. Como tampoco la astucia de Verza para interceptar una mala cesión de Bruno y plantarse ante Adán; su vaselina ha acabado en el palo y Deyverson ha enviado al larguero más clara de su carrera: solo desde el punto de penalti y a puerta vacía.

Esa doble ocasión ha tenido un efecto gaseoso en el Levante, que ha embotellado por momentos a su rival pero apenas ha podido llevarse un disparo desde fuera del área de Camarasa a la boca. Tampoco han sido más las opciones de gol en la segunda mitad, aunque las que ha habido han sido claras. Especialmente, el zurdazo de Deyverson desde el vértice del área, después de un error de Piccini en el despeje, que ha acabado de nuevo en el larguero. A la esquina se había ido la incursión previa de Pedro por banda, con el disparo final repelido por la zaga.

El Ciutat se ha girado hacia Sánchez Martínez al no pitar penalti sobre Roger en su segundo esfuerzo, tras estrellar en Adán la contra en la que había ganado por velocidad a la zaga local. El colegiado ha acabado pitando manos en el control del punta; del mismo modo que ha descontado solo cuatro minutos pese a las evidentes pérdidas de tiempo verdiblancas. En ese esfuerzo final. con el Betis en inferioridad a raíz de la segunda amarilla a Westermann, Camarasa ha aparecido por todos los lados pero las fuerzas no le han acompañado en el remate.

Ficha Técnica:

0. Levante: Rubén, Pedro López, Navarro, Feddal, Toño; Simao, Camarasa, Verza (Ghilas, m.74), Morales, Rubén (Casadesús, m.60) y Deyverson (Roger, m.68).

1. Betis: Adán, Piccini, Westermann, Bruno, Varela; N'Diaye, Petros, Dani (Figueras, m.83), Joaquín (Molinero, m.90), Cejudo (Van der Vaart, m.75) y Rubén Castro.

Gol: 0-1, m.4: Rubén Castro.

Árbitro: Sánchez Martínez (C. Murciano). Amonestó por el Levante a Deyverson, Pedro López, Roger y Verza, y por el Betis a N'Diaye y Adán. Expulsó al bético Westermann, por doble amonestación, en el minuto 79 y a Juanfran en el banquillo en el minuto 80.

Incidencias: Partido correspondiente a la jornada 13 de la Liga BBVA disputado en el estadio Ciutat de Valencia ante 13.950 espectadores.