El Levante ha celebrado este jueves la Junta General Ordinaria de Accionistas, la primera tras el proceso de venta fallido a Robert Sarver y en ella, el Consejo de Quico Catalán ha presentado un presupuesto récord para la presente temporada de 42 millones de euros. El club ha presentado un balance de ingresos de 42,2 millones de euros, cuyo aumento se debe principalmente porque el nuevo contrato de televisión se dispara hasta algo más de 34 millones, mientras que los gastos previstos son de 36,6, con lo que está fijado superávit por sexto año consecutivo, esta vez cercano a los 5,5 ´kilos´.

A pesar de las fracturas internas del verano a raíz de las negociaciones con Robert Sarver y a la salida del vicepresidente Tomás Pérez, y al margen de las citas de la Fundación para su regeneración, en este momento lo que hay en juego no son únicamente cuestiones de presupuesto sino la realidad deportiva de un equipo que está en la zona de descenso, que acaba de fichar al jugador más caro de su historia y que pelea por reengancharse. Del NH Center, Quico Catalán se ha marchado a la cena de la Delegación de Peñas, la primera de la era Gabriel Salinas, que cuenta también con la presencia de Rubi.