La lesión de Pedro López, quien sufrió una fractura en la falange media del cuarto dedo de su mano derecha, ha resultado finalmente más aparatoso que perjudicial para el equipo. El lateral derecho, que tuvo que ser sustituido por Lerma ante el Granada, podría reaparecer el próximo domingo en San Mamés si evoluciona correctamente; solo se perdería en ese caso el choque copero del martes ante el Espanyol, fijado ya de antemano para la reaparición de Iván López en el '2' granota. Contra el Athletic, el de Torrent, actuaría con una protección para evitar golpes en la zona dañada.

Al no haber desplazamiento del hueso, el percance es de menor gravedad del que aparenta a primera vista. Miguel Ángel Buil, jefe de los servicios médicos del Levante, redujo en el mismo estadio la luxación de la falange de Pedro, quien poco a poco se irá reincorporando a la disciplina del grupo. En la sesión de recuperación de este domingo no ha trabajado a las órdenes de RubiRubi, todavía afectado por la hinchazón y el dolor provocado por el percance.