José Luis Morales repasó ayer la actualidad granota y reconoció que, pese a que han mejorado bastante sus prestaciones en los últimos encuentros, todavía reciben goles con demasiada facilidad, lo que les está impidiendo sumar más puntos en la clasificación. Para el centrocampista madrileño, el duelo frente a Las Palmas es clave porque puede suponer un "punto de inflexión", por lo que pide la máxima "unión con la afición" de cara ese choque tan importante. Con respecto a la derrota en Vigo, Morales aboga por quedarse con "la reacción" del equipo, que «no se vino abajo con el 3-0.

"Tenemos una confianza muy buena en el juego que estamos haciendo últimamente, pero encajamos goles muy fácil y creo que tenemos que mejorar en ese aspecto", aseguró Morales quien no cree que el hecho de jugar el lunes, ya conociendo lo que han hecho los rivales directos en la jornada, suponga mayor dificultad para afrontar el duelo ante Las Palmas. "A lo mejor tienes un poquito más de presión porque ya sabes lo que han hecho tus rivales, pero puede ser el efecto contrario, en el caso de que tus rivales no hayan conseguido los puntos tu puedes salir con más fuerza y más ganas", afirmó.

Precisamente, Morales considera clave el encuentro frente a los amarillos. "Es otra final de las 18 que nos quedan, tenemos muchas ganas. Las Palmas es de los pocos equipos que no han ganado fuera y nos lo pondrán muy difícil porque si salen de Valencia con una victoria se separarían del descenso. Nosotros, si conseguimos los tres puntos nos enganchamos a la zona de salvación y puede ser un punto de inflexión para los próximos partidos. Sabemos que es trascendental", afirmó Morales, quien espera recibir el mismo aliento de la grada que en el último duelo en el Ciutat de Valencia frente al Rayo Vallecano. "Fue un apoyo incondicional hacia nosotros. Estamos haciendo todo lo posible y creo que si tenemos unión con la afición seguramente será más fácil sacar esto adelante", afirmó.

En cuanto a la pasada jornada, Morales tiene claro lo positivo y lo negativo que el equipo mostró en Vigo. "Hay que quedarse con la reacción del equipo después de encajar tres goles. Fue buena porque estuvimos cerca de empatar, pero al final es una reacción que te deja con la miel en los labios porque después del 3-0, te pones 3-2 y el equipo tira hacia delante. Es verdad que arriesgamos para empatar y nos marcaron el cuarto, pero después de encajar el tercer gol creo que pocos equipos reaccionan como lo hicimos nosotros", concluyó.