El desafío es de órdago y Rubi cree en la gesta. Quedan 16 finales y la inmediata es ante un Barcelona que viene de ‘hacerle un siete’ al Valencia, pero el Levante no va a darse por vencido antes de tiempo. Igual de efusivo e insistente en sus instrucciones que ante cualquier otro oponente, el míster, con pasado culé, prepara el plan ‘anti Barça’, la fórmula mágica para mantener la dinámica ante los líderes que pisan el Ciutat y que el domingo reventará para la visita de Leo Messi, Neymar, Luis Suárez y compañía. El Levante ha puntuado en ocho de las últimas once visitas del primer clasificado de turno de la Liga, con tres victorias, cinco empates y tres derrotas. El último que claudicó fue el Villarreal, el 1-0 de Deyverson.

Como dijo Giuseppe Rossi, el vestuario considera «una tontería» tenerle miedo al Barça por el 7-0. Confianza, ganas, personalidad y confianza en el ‘método Rubi’. El cuerpo técnico vio las ‘semis’ y tras las instrucciones en el campo, el desglose de las virtudes y pocos puntos débiles del líder siguió en el Ciutat. Jaume Torras, su segundo, se enclaustró con su portátil en la sala de prensa tras la comparencia de Rossi para dar con la tecla del éxito. «Vamos a seguir con las ideas del entrenador; vamos a cumplir lo que nos dice», aseguró el italiano. Ante un rival de esta envergadura, los errores del Pizjuán se penalizan todavía más. De ahí que la primera sesión a puerta cerrada (las de hoy y mañana también lo serán, pero en la Ciudad Deportiva de Buñol), Rubi insistió en el aspecto defensivo. Y en esta vertiente, la principal novedad apunta al lateral izquierdo con el debut de Lucas Orbán. El cedido por el vecino VCF también puede actuar de central zurdo, pero su ubicación, en principio, será de ‘3’, con Toño como sacrificado. No hubo partidillo a campo completo, pero la primera prueba esbozó algunas pinceladas del Levante que le espera al Barcelona: una línea de cuatro atrás con máxima intensidad, con un pivote defensivo (Simao Mate o Jefferson Lerma) y, por delante, tres futbolistas con libertad de movimientos para sorprender al contragolpe, que en principio serían Morales, Rossi y el brasileño Deyverson, que reaparecería después de cumplir sanción en la derrota contra el Sevilla (3-1). Hubo una simulación del cara a cara del domingo (12 horas), con cinco atacando al estilo Barça: un ‘tridente’ improvisado y un par de interiores con llegada.

Con José Mari, Pedro López y Juanfran en la enfermería, además de Rubén García y Víctor Casadesús -que realizaron la primera parte de la sesión-, Rubi cuenta con 20 jugadores. Entre ellos Carl Medjani, ya con el tránsfer para poder debutar. El argelino trabajó como central, tanto zurdo como diestro. Fue de los que más instrucciones recibió, además de Orbán. Su adaptación va a toda velocidadOrbán. La línea de cuatro de la zaga es la que más interrogantes presenta. Incluso en el lateral derecho. Iván naufragó en el Pizjuán y Lerma probó como variante en el ‘2’. El colombiano es el ‘chico para todo’ de Rubi. Un centrocampista todoterreno, que ha jugado en el doble pivote, como llegador, en banda derecha, incluso de mediapunta y que jugó de carrilero en la ida de Copa del Rey contra el Espanyol. Simao Mate repetiría por delante de la defensa, aunque ayer fue utilizado como una opción más para el centro de la retaguardia, como en la etapa de la línea de cinco de Lucas.