El Levante se metió en el partido con un gol de Giuseppe Rossi, y ya van cuatro desde que llegó a Valencia en el mercado invernal. De hecho, es el fichaje de enero que más tantos ha marcado en la liga española (4), superando a Cheryshev (3), con quien estaba empatado. Il Bambino dejó muestras de liderazgo pero sobre todo de calidad en una segunda parte que comenzó activo y que activó al resto de sus compañeros.

Verza cogía un balón en la frontal y se lo ponía a Rossi a la espalda de la defensa para encarar a Lux. Por el camino, Giuseppe realizó una maniobra fantástica con la cadera para dejar por el camino a Arribas y en ese momento superar, por fin, al meta del conjunto gallego. Genialidad del italiano que además se mostró activo entre líneas durante ese tramo, tal vez el mejor del Levante en el partido, y demostró que físicamente también evoluciona partido a partido.

En este tramo tan decisivo, Giuseppe Rossi además se ha vestido del Morales de comienzo de la segunda vuelta para ser decisivo marcando y asistiendo. El italiano ha participado en cinco goles en los últimos seis partidos como titular con la camiseta del Levante „3 goles y 2 asistencias„ y en Riazor evidenció un liderazgo que permite ser optimista a la afición granota a pesar de la derrota.

Rossi también se siente líder más allá de los goles. En Riazor se le vio en la presión cuando el equipo lo necesitaba e incluso echó una mano a los laterales cuando los extremos se habían quedado tras una acción ofensiva. A pesar de ese esfuerzo del internacional italiano, Rubi volvió a realizar el cambio al que tiene acostumbrado al jugador. Corría el minuto 75 cuando el cuarto árbitro enseñó el dorsal 21. Víctor Casadesús se preparaba desde la banda y Giuseppe Rossi inició el mismo camino al banquillo que ha tomado en los últimos seis choques que ha jugado como titular.

La tradición no cambió. Su gesto sin embargo fue menos ostentoso que en otros duelos en los que sí ha evidenciado mucho más su enfado. Ayer sin embargo, Rubi se decidió por él en un momento del partido en el que su participación era mucho mayor que la de Deyverson. En cualquier caso, su sustitución queda como una anécdota en un duelo que debe rescatar otra idea; Il Bambino se siente líder.