Es una de las preguntas del millón: ¿Por qué no juega Cuero?, el fichaje más caro de la historia del club. Rubi la ha contestado este sábado: “No es que vaya lento en su aclimatación, sino que el entrenador está considerando otras variantes y no es un problema de proceso, sino de que está apostando por un bloque”. Cuestionado sobre si su suplencia obedece a un motivo físico, táctico o mental, el de Vilassar ha respondido que “más táctica si tengo que elegir, pero también porque hay otros compañeros”.

Además, ha explicado que el poco carrete que le ha dado no se debe a la situación clasificatorio del equipo, sin margen para esperar a nadie: “No me he planteado qué habría ocurrido si la situación hubiera sido otra, lo que intento es ser justo con el rendimiento que veo en los entrenamientos y con la última referencia del partido que hemos jugado. A veces es muy difícil y a veces le perdono a alguno una mala actuación del domingo si luego ha entrenado bien”.