El Levante todavía no ha podido oficializar el fichaje de Juan Ramón López Muñiz como técnico del ascenso, pero están a punto. Los granotas ultiman en estos momentos la llegada del técnico asturiano y anunciar su fichaje para que de inmediato se meta de lleno en la planificación el proyecto del ascenso junto a Tito y Carmelo. El acuerdo con Muñiz, por una temporada más otra opcional, estaba cerrado desde pocos después de que el director deportivo trasladara al Consejo su candidato.
En Orriols no pensaban que el Alcorcón fuera a poner tantas reticencias. El club tenía claro que debía asumir una cantidad cercana a 100.000 euros a modo de traspaso, con la obligación de aumentar la partida que inicialmente se pretendía destinar al banquillo, pero las cifras han aumentado y ese es el aspecto que está ralentizando la oficialidad de la llegada de Muñiz. En la negociación, los granotas han llegado a ofrecer jugadores y también la posibilidad de jugar un amistoso. Lo que parecía una cuestión más rápida, el Levante está que sudando un poco más para cerrar al responsable del ascenso en el banquillo. Hay una tranquilidad relativa porque Muñiz dio su palabra desde el principio y también está poniendo de su parte para que las fugas pendientes se cierren para llegar a un punto de acuerdo con el Alcorcón. En ningún momento existía miedo a un supuesto movimiento de última hora del Rayo para convencer a López Muñiz. En Vallecas siguen recordando las tres temporadas como jugador rayista del todavía entrenador del Alcorcón.
