Con el equipo ascendido, líder dictatorial y ya campeón, las dos últimas jornadas ante Lugo y Huesca siguen teniendo mucha importancia para Muñiz y ese sentimiento de responsabilidad se lo hace ver a sus jugadores constantemente, que están respondiendo en el campo, y también públicamente, dejando a un lado su situación contractual. El Levante ya ha trasladado su propuesta de ampliación a Muñiz y su representante, Joseba Diaz, para que ambos respondan en días venideros. De aceptar, aumentaría su salario y firmaría un contrato nuevo hasta 2019; con el ascenso, su vinculación se prolongó automáticamente un año. Pese a este paso al frente, el discurso del técnico no varía. Con palabras de agradecimiento, su caso "no tiene una importancia vital" y no quiere que suponga un distracción en lo que resta de temporada y eso que los objetivos ya están conseguidos. Incluso quiso zanjarlo, ya que siente que suena a repetitivo. "No quiero que esto sea comentario de nada. En su momento se arreglará y lo diremos. Para mí no tiene una importancia vital y sí el partido que jugamos en Lugo. El resto no me preocupa ni quiero saberlo porque al final te distrae. Lo que intentamos es que la distracción sea con la familia en algún sitio de vacaciones", explicó.

Muñiz volvió a aparcar su situación porque además considera que hay otras prioridades. Pero lo que sí que hizo fue agradecer que el Levante siga mostrándole su confianza. "Siempre que un club se interesa por ti y quiere poner un proyecto importante en tus manos, hay que estar agradecido. El club cree oportuno ampliar el contrato y por mi parte estoy muy contento. Pero al saber que no va a haber ningún problema en que vamos a seguir aquí, no hay una prisa excesiva. Hay otros temas más importantes que abordar. El mío será un caso más entre los cientos que habrá y además en un apartado lejano porque mi situación está clara porque tengo un año de contrato más y no hay que estar todo el día pendiente de lo que va a suceder con eso", argumentó el asturiano, quien no se apresura porque lleguen esos tan repetidos cinco minutos para firmar la ampliación hasta 2019. "De la forma que es la relación (con Tito, Carmelo y Quico), no hace falta ir a ningún sitio a hablar, porque lo hacemos todos los días. Cuando haya alguna inquietud por alguna de las partes lo hablaremos y ya está. Igual le quito importancia, pero para mí es que no la tiene. Todo irá cayendo por su propio peso", añadió un profesional "agradecido" y con muchas cosas a favor como que "la familia está contenta" para seguir creciendo en Orriols.