Muy a su pesar, ambos se enfrentaron en el Ciutat de València a pecho descubierto. Habían perdido en el camino hasta el ascenso a sus patrocinadores principales (East United y CityLift, respectivamente) y no han conseguido reemplazarlos. Levante y Girona han superado el primer cuarto de LaLiga Santander sin anunciante alguno en el frontal de la camiseta y, llegado a este punto, ya «no está fácil» que lo tengan; lo reconocía Quico Catalán públicamente a finales de septiembre.

«No sé si será chino o no, pero más pronto que tarde estará», aseguraba el presidente a principios de julio. Entonces el panorama era más halagüeño, con tres o cuatro negociaciones abiertas; la mayoría, asiáticas. Ninguna de estas terminó por concretarse, en algún caso porque las firmas interesadas se han vinculado a otros clubes españoles, y en Orriols trabajan ahora contrarreloj y también contra natura.

Las cuentas salen aun sin el millón que pagaba por temporada East United, con la que se mantiene el litigio abierto por la ruptura unilateral de contrato a raíz del descenso. La empresa australiana de capital coreano se vinculó al Levante en con LaLiga Santander 14/15 ya empezada, aunque no tanto como ahora (a mediados de 2014) y con el evidente gancho de una visita del Madrid a Orriols como lanzamiento. Superados ya los duelos de la primera vuelta ante los merengues y el Valencia, habría que esperar a la penúltima jornada para encontrar un impacto mediático similar: el encuentro en el Camp Nou.

El Betis, mes a mes

Quico Catalán y Javi Vich, director de organización y gestión del club, han llevado los contactos con potenciales patrocinadores. Estos han sido en distintas capitales europeas, como Londres o París; y en China. El caso es que el Levante, junto al Girona y también el Leganés, es uno de los tres equipos de la máxima categoría que no ha ‘manchado’ el frontal de su camiseta. Todos ellos tienen firmas en la trasera: en el caso de los granotas, la Diputació de València y Balearia. El Betis se apoya en acuerdos mensuales.