El colombiano Jefferson Lerma se ha explayado este lunes en una extensa entrevista en su país con BLU Radio en la que ha reiterado su denuncia racista contra Iago Aspas y aportado más detalles sobre lo ocurrido en el partido disputado este domingo entre el Levante y el Celta de Vigo: "Hubo una jugada anterior en la que yo lo corto y cuando arranca a correr le doy en la cabeza. Él me reclama y le digo: '¿qué pasa?'. Y me responde: 'negro de mierda'. Fue un gesto muy feo. Ahí perdí la cabeza y quería buscarlo, joderlo".

En opinión de Lerma, la actitud de Aspas es muy reprochable, en especial cuando son los propios futbolistas los que hacen campañas contra el racismo a nivel mundial: "¿Qué le podemos pedir a las otras personas cuando nosotros lo hacemos? Eso no puede pasar. Todas las personas, independientemente del color, merecemos respeto".

"Lo que pasa en el campo se queda en el campo. Pero hay cosas que no se pueden pasar por alto. Acá tienen su forma de insultar y no se pueden decir las palabras de HP, etc. No es justo un acto de racismo. Igual que si fuera un marroquí, que ya sabemos qué les dicen muchas personas", asegura. "El club me ha respaldado. Si no encuentran un video todo va a quedar impune. Está en la consciencia de cada cual. Sólo que hay que ser un poco precavido en las palabras. No voy a jugar con la imagen de una persona diciendo que me ha dicho eso si es mentira".

Después de que Aspas le replicara horas después de su denuncia, Lerma le reta a un careo para que le diga a la cara que no hubo tal insulto: "No es justo decirle a una persona 'negro de mierda'. Y si él dice que yo lo insulté primero, que me diga en la cara que no me lo dijo".

Este no es el primer episodio racista en el que se ve envuelto el centrocampista del Levante, a quien el madridista Carvajal llamó "puto mono de mierda" a principios de temporada, tal y como revelaron a posteriori las imágenes del partido. Entonces, sin embargo, no lo escuchó en el campo, motivo por el que no se pronunció ni se sentía "en el derecho" de decir nada. "En este caso lo escuché. No me lo contaron, yo lo viví , me hirió y entonces tengo derecho a decirlo. ¿Por qué tengo que callarme?. Es la primera vez en el fútbol profesional que me dicen esto", dice el colombiano, que colgó este lema contra el racismo en redes sociales.

Sobre lo ocurrido con el árbitro, Álvarez Izquierdo, Lerma reconoce que ya "había perdido la cabeza" y que "después de lo que me dijo sólo tenía ganas de hacerle daño (a Aspas)". "Le pego en el tobillo, y al árbitro le digo: '¿qué quieres que haga si me ha llamado negro de mierda'? Me contesta que tengo ganas de darle y que deje de joderlo porque está hasta los cojones". Y añade: "En el acta ha puesto que no se entera y es algo que me parece desleal por parte del árbitro".

Lerma reconoce que no se arrepiente de nada y que "si hoy volviese a ocurrir, haría lo mismo, iría a buscarlo". "Por más que quieras controlarte, no puedes. Eso debe empezarse a cortar", insiste. "Es un tema que toca y quedará ahí, porque no se olvidará".

Réplica desde Vigo

Rubén Blanco, portero del Celta, también ha hablado del asunto: "Este tipo de acusaciones no le gustan a nadie. Cuanto menos se hable del tema, mejor. Se está haciendo daño a la imagen de Iago".