El Plan 2.000E contempla distintas condiciones en función del tipo de vehículo a adquirir, ya sea de categoría M1 (turismos) o de categoría N1 (lo que entendemos por vehículos comerciales ligeros). Ambas comparten la obligación de achatarrar un vehículo de antigüedad mínima de 10 años, o kilometraje no inferior a 250.000 kilómetros, para beneficiarse de la subvención en el caso de compra de un vehículo de no más de 30.000 euros. Pero en los vehículos comerciales, las restricciones en cuanto a las emisiones de CO2 del modelo a adquirir son más permisivas y sencillas, ya que únicamente no deberá de rebasar los 160 gr/km, sin tener en cuenta condicionantes adjuntos como los sistemas de seguridad o ecológicos, indispensables en según que turismos.

Con todo esto, se tendrá acceso a los 1.000 euros de ayuda que aporta el fabricante o importador del vehículo, y a los 500 que ofrece el Gobierno central, pero, en el caso de la Comunitat Valenciana, no se obtendrán los 1.000 E de ayuda del Consell, ya que el Plan Prever Comunitat Valenciana 2009 no contempla este tipo de vehículos.

Ya sea por la falta de apoyo a este sector en determinadas autonomías, por la obligación de achatarrar un vehículo del mismo tipo del que se va a adquirir, o por ser modelos destinados principalmente al trabajo -en un momento de crisis global-, lo cierto es que la ligera progresión de las ventas de turismos desde la puesta en marcha del Plan 2000E no se está extendiendo al segmento de vehículos comerciales ligeros, que cerró el pasado mes de mayo con un desplome del 51%, a la espera de lo que pase en el presente mes de junio.