El Valencia CF abandona por un día la ciudad deportiva de Paterna para trasladarse al Parador de El Saler. Allí hay programado un entrenamiento y una posterior comida de equipo en el restaurante. No es una conjura ni nada por el estilo. Solo es un intento más de Ayestaran por hacer más fuerte al grupo y preparar a sus jugadores para las siete jornadas de Liga que tienen por delante. Hay mucho en juego. Por eso cualquier iniciativa es poca.