La Villa Olímpica está bastante bien, ¡es muy grande!. La verdad es que tengo que reconoce que cansa bastante ir de un sitio a otro. Nosotros estamos 'mal' acostumbrados a tenerlo todo muy cómodo en los torneos ATP, en tener el transporte en la puerta del hotel, en la puerta del club. Y aquí en Río es distinto, tenemos que coger el bus, que sale cada 20 minutos, tenemos que caminar unos 15 o 20 minutos cada vez para ir al restaurante, para ir a la parada del autobús... hay menos comodidades, es muy diferente. La seguridad es máxima, en la Villa no entra nadie que no esté acreditado, hay muchos controles tanto para entrar como para salir. Así que nos sentimos muy seguros aquí dentro.

Esta semana voy a compartir mucho tiempo con David (Ferrer), ya que jugamos el dobles juntos y tengo que confesar que estoy muy contento de poder disfrutar de una semana así, con David, con Rafa (Nadal), con Marc (López), con Albert (Ramos), pero sobre todo me encanta estar con David, aprovecho cada minuto y cada segundo que estoy con él para empaparme al máximo de todo lo que tiene dentro, siempre he reconocido que es mi ejemplo a seguir y tener ahora la oportunidad de jugar juntos es prácticamente un sueño cumplido.

Una de las cosas que peor estoy llevando es el jet-lag. Hace ya un par de días que llegué pero aún no me he acostumbrado al horario. Estábamos pendientes de si al final jugaba el individual ante Kuznetsov el sábado o el domingo ya que de eso dependía un poco que pudiera ir a la ceremonia de inauguración. Porque Maracaná está a hora y media de la Villa y nos vanos a las 17:00 y volvemos sobre la 01:30, sin cenar ni nada, pero me apetece mucho disfrutar de la experiencia de estar en Maracaná, desfilar y aunque luego esté más cansado, pues me aguanto un poco que una experiencia así no se vive todos los días.

Pasamos mucho tiempo los españoles juntos, haciendo piña, haciendo más equipo y eso también es una experiencia muy bonita de vivir.

Más artículos sobre Roberto Bautista Agut, aquí.