El nadador estadounidense Ryan Lochte perdió este lunes los contratos que tenía con cuatro patrocinadores como consecuencia de la controversia que protagonizó en Río de Janeiro al inventarse una versión de un asalto en una gasolinera que nunca existió.

Tras admitir que mintió, explicó que en realidad lo que sucedió fue que él y otros tres compañeros del equipo de natación en los Juegos Olímpicos estaban ebrios y provocaron desperfectos en la gasolinera donde llegaron de madrugada y al no quererlos pagar, los agentes de seguridad los obligaron a hacerlo a punta de pistola.

Rochte conoció hoy que tres de las cuatro compañías que lo patrocinaban -Speedo, Gentle Hair Removal y Airwave- a través de sendos comunicados oficiales dieron por terminados los contratos que mantenían con el nadador medallista estadounidense, mientras que Ralph Lauren dijo que no le renovaría el contrato que concluyó nada más finalizar los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro.

Speedo, que tenía firmado un contrato con Lochte por 10 años desde el 2006, en un comunicado oficial ofrecido hoy, lunes, dijo daba por terminada la relación profesional con el nadador estadounidense, ganador de 12 medallas olímpicas, incluidas seis de oro, mientras uso sus productos.

"Hemos disfrutado de la relación ganadora con Ryan por más de una década y ha sido un miembro muy importante para el equipo de Speedo, pero no podemos aceptar el comportamiento contrario a los valores de nuestra marca ha mantenido por mucho tiempo", destaca el comunicado oficial de la compañía. "Apreciamos los muchos logros que ha conseguido y esperamos que siga adelante y aprenda de esta experiencia".

Speedo también dijo que podría donar 50.000 dólares del contrato de Lochte a la organización 'Save The Children' para que les lleguen a los niños de Brasil.

Sin embargo, la compañía no dio a conocer el tiempo de duración de contrato que le quedaba a Lochte con Speedo.

Por su parte, el nadador en otro comunicado ofrecido a través de 'E!News' dijo que respetaba la decisión Speedo y estaba agradecido por todas las oportunidades que había recibido durante la colaboración entre ambas partes.

"Me siento orgulloso de los logros alcanzados durante tantos años en un trabajo de equipo", destacó Lochte.

Posteriormente, la compañía Ralph Laurent también dio a conocer un comunicado en el que informaba que no iba a renovarle el contrato que tenía firmado con Lochte.

"Ralph Laurent seguirá patrocinando con orgullo al Equipo Olímpico de Estados Unidos y al Paralimpico y los valores que representan los atletas", destaca el comunicado. "El contrato de Ralph Laurent con Ryan Lochte era específicamente en apoyo de los Juegos Olímpicos de Río 2016 y la compañía no se lo renovará".

Luego llegarían los comunicados de Airweave (colchones) y Gentle Hair Removal (cosmética), que en un principio habían manifestado que iban a esperar para conocer toda la información sobre lo sucedido.

Lochte, que admitió que se encontraba borracho en la madrugada del pasado 14 de agosto, destrozó un letrero de la estación de gasolina y junto a sus compañeros fueron obligados a punta de pistola por el personal de seguridad del establecimiento para que pagasen los daños.

Más tarde, el nadador de 32 años dijo en una entrevista a la cadena de televisión NBC que habían sido robados a punta de pistola, versión que posteriormente el mismo definió como "exagerada".

El propio nadador tras reconocer la verdad de los hechos también admitió que era consciente que la primera versión que dio le podría costar la perdida de patrocinadores.

"Soy consciente de esa realidad y debo estar preparado para enfrentarla de cara al futuro", destacó Lochte a través del mismo medio de comunicación.

Por su parte, tanto el Comité Olímpico de Estados Unidos (USOC) como el Comité Olímpico (COI) estudian el tipo de acción disciplinaria que le será impuesta a Lochte por sus acciones.

El presidente del USOC, Scott Blackmun, fue categórico el domingo tras el acto de clausura de los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro, al declarar que el equipo de Estados Unidos se definía por el gran triunfo logrado en la competición deportiva (121 medallas, 46 de oro, 37 de plata y 38 de bronce) y no por los hechos y la imagen que ofreció Lochte.