Si quieren pueden mirar hacia otro lado. Pero el Valencia está establecido en una línea de mediocridad que sólo te conduce a la nada. Perdón, a la zona de equipos medianos que nada tienen que ver con un Valencia depresivo. Gana y pierde. Pero no sabe a qué juega. Y por momentos parece un juguete roto. Me pareció atrevida cuando hace unos días se debatían entre un título o entrar en la Champions. Debía estar yo en otro planeta, que puede ser, pero si uno está instalado en la mediocridad debe callar y trabajar. Si sigues haciendo lo mismo es imposible salir de ahí. En el fútbol no te puede tocar la lotería todos los partidos.

Pabón

Pidieron «huevos» y...gol

Minuto 28 de partido: «Échale huevos, Valencia échale huevos». Instantes después, Pabón trata de imitar su trallazo de Getafe y aunque no lo puede repetir, le vale para empatar un partido que tenía mala pinta. Tanta, que hasta dos minutos antes empezó a calentar Canales en banda, algo impropio si no es por la lesión de un jugador. Djukic prefirió esperar. ¿A quién habría quitado? La respuesta llegó al descanso: Éver Banega, de líder a?

Amadeo Salvo

La promesa no debe importar

Amadeo Salvo defiende su bandera hasta el último instante, pero ojo, el análisis no puede limitarse a la promesa pública de mantener «al entrenador hasta final de temporada». Hay que hacer un análisis más profundo, pero claro, ahora sin Director Deportivo „en teoría una persona más capacitada que él en materia deportiva„ ¿quién decide? Ponerse una venda en los ojos nunca es bueno, ni cuando vienen bien o mal dadas. Si Djukic ha puesto a todos los que tiene y ha cambiado el dibujo varias veces...¿cómo se puede resolver esto? Haciendo lo mismo en el día a día no, esté el entrenador que esté, la reacción no iba a llegar por ganar al Getafe o a los amigos suizos. Creer eso es no ser consciente del problema que se tiene entre manos.

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