¿De verdad que no sentís vergüenza?

Me duele llegar a la conclusión de que no tenéis alma, es como si no fuerais conscientes de lo que hay detrás de la camiseta que lleváis cada partido, de la cantidad de personas que llora por ella. ¿No sentís nada especial ni diferente cuando miráis ese escudo? ¿Nada? Si es así, ¿tampoco sentís nada por la gente que sufre por esos colores? ¿Alguno de vosotros es capaz de imaginarse la decepción en la que vive cada valencianista? La gente del Valencia cuenta los días de la semana para que llegue cada partido con la esperanza de ver algo más que sombras deambulando por el terreno de juego.

¿Sabéis lo duro que es para cada aficionado de este equipo ir al Vicente Calderón con la certeza de que nos van a meter cuatro o cinco goles? ¿Lo sabéis? Haceos un favor y por un rato echad la vista atrás, y después, poneros en la piel de un aficionado, de ese simple valencianista que ya no pide a su equipo ganar, pide que compita y caiga con orgullo. De esa y no de otra manera es como se ha forjado este club a lo largo de los años. Que lo de Djukic no tiene remedio ya no vale porque ahora hablamos de sentimiento, de tener vergüenza o no tenerla, de ser, en definitiva, FUTBOLISTAS DEL VALENCIA.

O si queréis, FUTBOLISTAS sin más. Si os preocupa la venta del Valencia dejad que os diga que nadie ha ido a casa de los aficionados a transmitirles tranquilidad porque pase lo que pase sus contratos se van a cumplir. Podéis decir que soy un demagogo pero ya me da igual porque en el fondo sabéis que tengo razón. Si no es así, si no pensáis que tengo razón aunque sea una poca, tal vez el problema sea más profundo de lo que parece€ Miraros el ombligo y pensad si todos y cada uno de vosotros estáis haciendo todo lo que podéis hacer. O si todos estáis en vuestro peso ideal, por ir a un ejemplo que se puede medir con algo más que palabras „eso que los expertos llaman ´porcentaje de grasa´„.

Que sí, que sí, que el discurso de cada partido, eso de que "vamos que somos el Valencia", no vale para el fútbol profesional, que lo que vale es trabajar de verdad cada partido y cada entrenamiento. Que sí, que ya sé que lo que valen son disposiciones tácticas concretas que sean capaces de hacer daño al rival y anular sus virtudes y que lo que le pasa al equipo es que el colectivo sale al terreno de juego sin tener claro cómo manejar un partido porque ni ha habido órdenes concretas ni certeras. Lo sé perfectamente, pero repito, hablo de otra cosa. Poco más tengo que deciros, jugadores del Valencia. Si acaso, que mañana en el Vicente Calderón, podéis hacer lo que os dé la gana, que nosotros vamos a seguir sufriendo porque «pasa el tiempo y pasa la gente, jugadores y presidentes...» De Djukic ya no espero nada. De vosotros sí. Por cierto, que no se vuelva a repetir eso de no ir a saludar a los aficionados€ queda muy feo.

(PD: Me he permitido la enorme licencia de hablar por boca de los aficionados del Valencia, es un atrevimiento considerable y por ello pido perdón si a alguien he ofendido tratando de representarle cuando hay veces que no me represento ni a mí mismo...).

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