Jorge Mendes y fichaje a coste cero no son términos fáciles de conectar y a las pruebas hay que remitirse, así que para el caso de Bakkali hay dos opciones, celebrarlo o ponerse en guardia. También cabe la posibilidad de hacer las dos cosas, quizá sea lo más sensato porque hablamos de un futbolista que según los que entienden tiene calidad, una proyección tremenda y es una oportunidad que no se puede dejar pasar. Quizá nunca lleguemos a saber lo que cuesta y lo que se lleva su agente, pero en Mestalla y delante de 50.000 aficionados no es fácil engañar. Hace un año cabía algún Filipe Augusto porque el equipo no estaba en Europa, ahora todo el que venga ha de ser para sumar y mejorar lo presente, hay que dar la talla que requiere el Valencia compitiendo en la Liga de Campeones.

Proceso de venta

El levantinismo va a negociar con el americano Rober Sarver. No es el hecho de vender lo que más confunde a la gente, sino la sensación de que esto hay que hacerlo deprisa y corriendo, cuando la decisión es trascendente y especialmente difícil de tomar en este caso. Sí, puede ser hasta cierto que hoy el Levante UD no tiene necesidad de vender, pero no es el hoy lo que está en juego sino el mañana. Llega el proceso de venta justo después de una temporada de temores más que justificados por el descenso, algo que no conviene dejar de lado porque esa sí sería una noticia catastrófica para el hoy y para el mañana. La decisión del Patronato, por responsabilidad, no podía ser otra, es la mejor manera de defender al Levante por mucho dolor que pueda causar el hecho de negociar la venta de otro de nuestros símbolos.