Lo cómodo y ventajista es hablar a toro pasado, o como dicen en mi pueblo, ´si te collons, maxo´, así que asumiéndolo y partiendo de la base de que no soy nadie para dar consejos y menos al representante de Otamendi, y dejando muy claro que no tengo ninguna intención de hacerlo, vamos con algunas reflexiones que hago precisamente hoy que Otamendi tiene que comerse el marronazo de incorporarse a la disciplina del Valencia, aunque conforme lo escribo, lo de ´comerse el marronazo de incorporarse a la disciplina del Valencia´ tiene muchos matices. Avancemos porque tengo unas preguntas que hacer; ¿y si el señor representante de Otamendi hubiera estado callado? ¿Sería la situación como es ahora? ¿Hizo bien o hizo mal? Visto dos meses después, ¿benefició a Otamendi que es para quien trabaja -no nos equivoquemos-? Analicemos la situación a día de hoy; el jugador está contra la espada y la pared, la afición esperando a que se pronuncie aunque dispuesta a perdonarlo porque en el terreno de juego ha sido ejemplar, el club tan asustado que no quiere que nadie se acerque al jugador temeroso del ruido que pueden provocar sus palabras -y me parece lógico-, y sabedor de que cuanto menos ruido, más opciones tiene de que se quede por pocas que sean las opciones que haya de que se quede. El entrenador está condenado a entender al jugador pero se muere de ganas por tenerlo a sus órdenes, y dice que se lo lleva a Alemania porque supongo tiene información de que nadie pone 50 millones en la mesa. Chico, la jugada le ha salida redonda a este hombre... Pero hay más, porque cuando un agente o un jugador dicen en público que quieren irse y que no hay opciones de seguir es porque quieren presionar al club, y si pillan con un club débil pueden salirse con la suya, de momento, el Valencia no ha cedido -síntoma de que goza de buena salud-, y por ello merecen una felicitación Layhoon y Peter Lim. Insisto, no sé si Mendes tiene la capacidad de vender a Otamendi por menos de 50, y entiendo que Lim puede venderlo por un plato de ´tramusos´ y una litrona de plástico caliente, pero si lo hacen, nadie les va a salvar del escarnio público. Son 50, que lo dijo la presidenta Layhoon públicamente. Por otra parte, la firmeza de Nuno con este tema me produce buen rollo, porque si alguien sabe cómo están las cosas es él. El día que dude con Otamendi, peligro...