Jaume Domènech llamó ayer a la puerta de la liga de las estrellas y lo hizo con una personalidad brutal. Y por cierto, personalidad la que le echó ayer Nuno apostando por Jaume cuando lo que habitualmente hacen los entrenadores es ponerse en manos del jugador con más veteranía. Y más en una posición tan específica como la de portero.

Volviendo a Jaume, está claro que el chaval se coronó ayer con un partido extraordinario. Sin encajar un sólo gol y haciendo un sinfín de paradones de un meritazo extraordinario en El Molinón.

Cuidar la cantera

Si miras a Gayà, que ayer volvió a parecerse al de la temporada pasada, y ves a Jaume, y valoras el gol de Alcácer se llega a la conclusión de que es importantísimo cuidar la cantera. Que la cartera de Jorge Mendes (que en un alto porcentaje es la de Peter Lim) está muy bien, pero Alesanco tiene un vivero que da futbolistas de primer orden si se cuida. Así que le pido al nuevo ´jefe´ de la escuela que riegue bien las plantas, que fruto bueno ya sabemos que dan.

Paco más Negredo

¿Y del partido? De menos a más. Comenzando tiubeantes, para acabar de más a menos con el recital de Jaume y el oasis salvador de Paco Alcácer. Nunca descarten a Alcácer, se equivocan si lo hacen. Pero esto es Valencia, y parece que si eres de Alcácer has de matar a Negredo, y que si eres de Negredo has de decir que Alcácer es una milonga.

Yo soy de Paco Alcácer, me tiene ganado. Pero prescindir de Negredo cuando el Tiburón vuelve a acercarse al futbolista por el cual el Valencia pagó 27 kilates me parece absurdo. Alcácer es muy bueno, y Negredo también. No es uno u otro, sino los dos.

Enzo, Bakkali y André

Quitando el inciso para hablar de los dos delanteros. Las buenas noticias fueron por este órden: que Enzo se parezca cada vez más al del Mundial, que haya vuelto „y de qué manera„ André Gomes, que Bakkali siempre acaba dejando un detallito en cada partido, y sobre todo que el equipo volvió a sumar tres puntos.

Mejor paso a paso

Comencé por el portero, Jaume Domènech, y acabo por él. Sé que es el día de lanzar las campanas al vuelo y que en momentos de euforia está mal visto pedir calma, pero no puedo evitar hacer lo que creo que puede ser mejor para el chico. Es Jaume, ha tenido un debut que cualquier portero novel firmaría. Salvó lo posible y lo imposible, las paró de todos los colores, pero es precisamente eso: Jaume. No caigamos en el error de creer que ya hemos descubierto a Oliver Kahn o Gian Luigi Buffon. Error mayúsculo del entorno y flaco favor que se le haría al futbolista.

Dejemos que Jaume sea Jaume, porque este chico tiene algo...