Comenzamos 2016 como finalizó su predecesor, con la entrada de fiscales a un organismo, búsqueda de datos económicos y contractuales en ordenadores, arrestos y procesamientos? Y no, no estamos hablando del último best seller ni de la película de acción de moda o la serie televisiva de relumbrón, a modo de la modélica True Detective (la primera temporada), sino, otra vez, de fútbol. Ya parece cansino hablar de sobornos y delitos, pero justamente lo que debemos hacer es no olvidarnos de que existen y, sobre todo, de que se ha descubierto la punta del iceberg y que se debe seguir indagando hasta sacar todo el pus del interior de nuestro deporte.

Si dejamos pasar o nos aburrimos de lo que se está sacando a la luz, estaremos dándole alas a los que cometieron faltas o a los que quieran hacerlo. Al igual que a los políticos, todos los que estén en una caja pública o semi-pública „como es la del fútbol en la mayoría de casos„ no pueden salir impunes por su labor como malhechores.

El pasado día 8 de enero, fiscales paraguayos, alentados por sus compañeros estadounidenses e uruguayos, entraron en la sede de CONMEBOL en Asunción, con el fin de obtener información en los ordenadores del organismo sudamericano. No se ha llegado a tiempo para lo que, al parecer, ocurrió hace unas semanas, con la supuesta desaparición de documentación, pero esperemos que no sea demasiado tarde.

Los abogados de CONMEBOL se sorprendieron del "allanamiento", aunque este fue legal, porque según ellos, se estaba dando todo el soporte y ayuda necesaria a las autoridades de EE UU, Uruguay y Paraguay, en su largo caminar para lograr pruebas incriminatorias. Lo que sí ha sido bastante claro es que, desgraciadamente, "algunos documentos personales del Dr. Leoz", antiguo presidente de la institución, no se pudieron encontrar.

Pero, al menos, algunas cosas sí han quedado claras, porque solo unos días antes, en vísperas de Navidad, se produjo el procesamiento de otro Presidente de CONMEBOL, lo que parece ser el designio de todos ellos, Eugenio Figueredo, por la Juez encargada del caso en Montevideo.

Al señor Figueredo, anciano de 83 años, se la ha enviado a la cárcel de momento, con control médico por sus problemas de salud, pero sin atender a la petición de su defensa de arresto domiciliario. Veremos si lo consigue en breve, pero será, en todo caso, una prisión, aunque más cómoda.

Para que ello ocurriera, hubo cante de Figueredo, dando pelos y señales, cantidades y nombres de todo lo que ocurría en CONMEBOL durante los últimos años. Un vaivén de dinero que pasaba a manos de dirigentes, como un sobresueldo que, según aquél, era normal y se consideraba parte de ser mandamás. También parecía algo lógico no dar a quien ofrecía más la posibilidad de obtener la licencia de derechos televisivos para las competiciones internacionales sudamericanas. Todo ello está bien documentado y no harán falta ordenadores. El Sr. Figueredo ha sido muy directo en sus declaraciones.

Pero, ¿será suficiente para que, como me preguntaba, haya fútbol nuevo? La corrupción es algo que parece innato en el ser humano, al menos cuando lleva demasiados años en el poder (sea éste el que sea, desde una mini-federación o pequeño club hasta la más gigantesca de los organizaciones como FIFA o la IAAF), pero aun sabiendo esto, no debemos cesar en descubrir a los que la practican.

Con las elecciones a Presidente de FIFA en febrero y las de UEFA seguramente unos meses después, nos esperan años de limpieza a fondo, que esperemos sean muchos. Soy optimista porque sopla un viento nuevo y quienes llegan o vayan a llegar saben que serán diseccionados en sus comportamientos y un contrato verbal, por muy legal que sea en Suiza, deberá estar escrito. El Sr. Platini, que pagó impuestos por ese contrato, lo sabe y se lamenta mucho de no haberlo hecho, a pesar de declarar todo pero, a veces, la estructura ética es distinta a la legal.

Nos proponemos todos hacer cosas nuevas o quitarnos vicios anclados cuando empieza un año nuevo. Intentemos todos, en la medida de lo posible, en lo que nos toca, hacer del fútbol un lugar donde podamos disfrutar, olvidar problemas y lograr una mejoría social, con jóvenes dando el do de pecho no para ser ricos futbolistas sino grandes deportistas y personas. Es evidente que si se inculca desde pequeño valores, se podrían evitar lodos posteriores. Y no quiero ponerme nostálgico pero sí acabaré con una nota de ese estilo, recomendando el tebeo, cómic o BD, como Vds. quieran que el valenciano Paco Roca ha publicado, ´La Casa´, que nos llevará a años de infancia perdida pero les prometo que les hará disfrutar.