La pregunta del titular es clara y esconde una verdad incuestionable. ¿A quién le protesto yo? Estamos en la recta final del campeonato de Liga y con un partido a vida o muerte pasado mañana ante el Athletic. ¿Y? Pues que yo veo a un Valencia descabezado, sin alma, sin un mínimo latido de su corazón para ganar los partidos y lo que para mí resulta más evidente es que el divorcio entre el técnico y sus futbolists empieza a dar vértigo solo con mirarlo. La realidad es que el Valencia se descompone por segundos. Yo lo de bajar a segunda lo veo imposible. Existen demasiados equipos por medio que tampoco tienden a ganar apenas puntos. Pero, a todo esto, ¿existe Peter Lim?

¿Dónde está Peter?

La actual situación del Valencia es compleja pero más compleja resulta su solución. El asunto es muy simple. Aquí el que en teoría -y sin teoría- manda no es otro que Peter Lim. Y a estas alturas de temporada, con el equipo hecho un desastre y con un entrenador abandonado a su suerte por sus propios futbolistas, bueno sería que alguien con conocimiento de causa y con conocimiento del fútbol europeo metiera mano en el asunto para que el desastre no se convierta en algo irremediable. Y sí, obviamente me estoy refiriendo al máximo accionista del club, ese hombre que anda liado en mil negocios y para el que da la impresión que el Valencia le importa un comino. No habla, no viene, no dice... Peter Lim es un desaparecido en combate pero no olvidemos que es el máximo responsable de este Valencia que está dejando una imagen bochornosa. ¿Qué dice Peter?

Sin respuesta

Lo cierto es que no se vislumbra ninguna respuesta por parte de Peter y ninguna respuesta tampoco por parte de su socia y presidenta Layhoon. El equipo, eso sí, ha bajado los brazos de forma bochornosa. Lo dijo Paquito Alcácer al acabar el partido contra el Levante UD y parece que sus palabras han pasado prácticamente desapercibidas. Pero va y resulta que Paquito Alcácer es posiblemente el único internacional español de este equipo, que además es canterano, que además es valenciano y que además se ha criado en el Valencia CF. Y lo dice claro y en el fondo parece que no esté diciendo nada del otro jueves. Alcácer está preguntando de forma pública y notoria... ¿que pasa? Y yo empezaría por responderle que gran parte de la culpa de este mal que tiene al Valencia en un sinvivir la tienen sus propios compañeros de vestuario. Si un equipo no corre ni presiona no miren al entrenador. Puede darse que no confían en el entrenador, pero los que realmente corren y marcan son los futbolistas y estos saben como hacerlo. Y sin embargo no hacen nada.

No hay respuestas

Soy un aficionado más del Valencia que asiste desilusionado a los acontecimientos. Sé, es obvio, que Gary Neville no era un entrenador hecho para tomar las riendas del Valencia, pero tampoco era un tipo mal encarado que buscaba hacer daño a sus jugadores. Gary Neville tuvo mis respetos en la medida que era el hombre elegido por el máximo accionista y por lo tanto también con el respaldo del máximo accionista. Ahora, sin embargo, se le ve medio perdido y sus jugadores saltan al campo simplemente a pasearse, pasando de todo, arrastrando el nombre del Valencia allá por donde duele. Neville oficialmente manda sobre ellos pero a ellos -mayoría- se la sopla lo que diga Gary Neville. Y el asunto es grave. El jueves, hoy mientras escribo, debería estar pensando en el partido de vuelta contra el Athletic que es donde el Valencia se juega toda su vida en la actual temporada. Y miren, si ves la trayectoria de uno y otro equipo das por hecho que el 1-0 les va a valer de sobra a los vascos para seguir adelante. Y eso da pena. Da pena ver como el Valencia se tambalea y aquí nadie parece responsable. Y da más pena aún ver como los niños valencianos se hacen más seguidores del Barça o del Madrid que del equipo de su ciudad. Y por ahí viene el futuro y ese lo estamos perdiendo de forma contundente. ¿Y qué dice Peter?

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