Hemos escuchado muchas veces que la sanción de la Unión Europea no es al Valencia CF sino a lo que ellos llaman Reino de España, pero no, que nadie vaya a pensar que la tiene que pagar el Rey, la tienen que pagar Peter Lim y el Valencia CF aunque al final aquí todos van a salir perdiendo excepto los verdaderos responsables, que por lo visto todavía no han sido llamados a declarar ante el Tribunal Europeo.Al final, si por el hecho de asumir esta sanción de 23,6 millones el Valencia CF viera condicionado su proyecto deportivo hasta el punto de fracasar la próxima temporada, el daño sería irreparable para el club

porque estamos ante un año estratégicamente decisivo. Aunque habrá también daños colaterales.

Si el Valencia CF pierde este tren, perderá València, perderá la Comunitat Valenciana y perderá España. Menos volumen de negocio, menos expectativas de mercado, menos inversión, menos proyección exterior, menos inversión de patrocinadores externos, menos impuestos, menos movimiento de turismo futbolero... Un desastre que podría ser evitable.

Más opiniones de Julián Montoro.