El alcalde-gobernador de Berlín, el socialdemócrata Klaus Wowereit, regaló hoy al velocista jamaicano Usain Bolt un segmento original con un peso de tres toneladas del muro que dividió la capital alemana hasta hace 20 años.

"Usain Bolt ha demostrado deportivamente que se pueden derribar muros aparentemente infranqueables", dijo Wowereit en presencia de la estrella de los Mundiales de Atletismo de Berlín en una austera ceremonia fuera del Estadio Olímpico berlinés.

Con cara seria y visiblemente emocionado Bolt afirmó que "nunca podré olvidar Berlín, tampoco su pista azul. Ha sido todo maravilloso aquí".

"Soy un berlino (sic)", dijo Bolt seguidamente, frase que ya mostró escrita en alemán sobre su camiseta poco antes de celebrarse la final de 200 metros, que ganó con un nuevo récord mundial.

A cambio del gigantesco regalo, una mole maciza de hormigón de tres metros de altura, Bolt hizo entrega a la ciudad de Berlín de un par de zapatillas de color naranja como las que habitualmente usa en las competiciones.

El segmento original del muro de Berlín, en el que se ha pintado la figura de Bolt corriendo a tamaño natural, le será enviado por las autoridades berlinesas hasta su centro de entrenamiento en Jamaica.