La carrera hacia los Juegos Olímpicos de Londres 2012 se ha visto salpicada por el positivo que la maratoniana Alessandra Aguilar dio el pasado 8 de diciembre en el cross de Cantimpalos (Segovia) y que trascendió esta semana en un foro especializado de Internet, según publicaba ayer El País. La atleta asume su error tras dar positivo por heptaminol, un estimulante prohibido solo durante la competición pero que algunos deportistas toman en periodos de descanso para combatir la fatiga. «He cometido un error de novata al no leer el prospecto. Confiaba plenamente en mi médico, pero me equivoqué y tengo que pagar por mi error y el suyo», explicó ayer la atleta en su perfil de Facebook, donde defendió su inocencia. «Nunca he tenido intención de doparme. Mis éxitos son fruto de años de trabajo y esfuerzo».

«Sigo manteniendo mi postura crítica ante el dopaje y seguiré luchano por un deporte limpio», añade la gallega, de 33 años. «Cro que no es lo mismo un positivo por EPO, anabolizantes y hormonas que por un medicamente como el mío (Denubil) o similar. Soy consciente de mi error, asumo mi parte de culpa y la sanción que me impongan». Aguilar se expone a un castigo para esta sustancia de entre tres y seis meses. Contando desde el 8 de diciembre, podría estar en los JJOO, que empiezan el 27 de julio.

La atleta ya compitió en Pekín 2008, y con sus 2h33:08 en Nueva York logró el billete para los Juegos Olímpicos de Londres. A ella se unió después Vanessa Veiga, como campeona de España en el maratón de Castelló, que asignaba plaza directa. Por la tercera y última plaza pelean varias atletas, entre ellas la valenciana Bea Molina que ahora tiene más opciones.