Santi será el rival de Soro III en la final del XXVII Individual Bancaixa. El pelotari de Finestrat se ganó tal privilegio ayer en el trinquet de Bellreguard tras superar a Puchol II en la partida definitiva de la liguilla de semifinales (60-25).

El mitger necesitaba la victoria para superar a Fageca en la clasificación y no solamente se hizo con el triunfo sino que además abrió la puerta grande con una excelente actuación. Como en las partidas anteriores, exceptuando la que le enfrentó contra Soro III, Santi volvió a destacar por su inteligencia ya que el jugador es consciente de sus limitaciones en el mano a mano y explota a la perfección sus virtudes.

Así, el juego de Santi se basó en su solvencia en el golpeo de aire, que Puchol II no pudo evitar. Pero además hay que destacar el acierto del de Finestrat en tareas propias de los escaleters, como la ejecución del dau o los rebotes. Y en ambas facetas el jugador estuvo más que acertado.

En cuanto a la partida, los primeros compases estuvieron marcados por la igualdad y los dos pelotaris hacían buena su posición en el dau. Así se llegó al 30 por 25 para Santi. En el parcial siguiente, el propicio para igualar para Puchol II, el de Vinalesa dispuso de val para anotar pero Santi le dio la vuelta al juego a base de restadas de mérito y de remates con intención, bien fuese buscando la galería o las murallas.

Este juego marcó la posterior actuación de Puchol II, que a partir de ese instante pasó a capear el temporal, ya que la iniciativa casi siempre venía del lado de Santi. Y aunque los intercambios de mérito existieron, era evidente la diferencia en el rendimiento entre uno y otro.

Al acabar el envite, Santi explicaba que había vuelto a ser fiel a su filosofía de juego y que esta vez sí había ofrecido su nivel habitual: «Soy consciente de que no puedo competir con los escaleters en igualdad de condiciones. Por eso intento colocar la primera pelota del dau y a partir de ahí correr para rematar de aire. Esta es la táctica que sigo en todas las partidas del mano a mano y hoy (por ayer) me ha salido bastante bien», explica el jugador.

En la final, Santi se volverá a cruzar con Soro III, que en las semifinales le ha superado por 60-20. Pero Santi no cree que esta partida sea un referente válido. «Lo de Massamagrell fue un accidente, un mal día. No estuve a mi nivel y lo reconozco. Pero el trinquet de Moncada es distinto y yo he recuperado las buenas sensaciones, al menos para dar guerra en la final», concluye.