Dos atletas valencianos salvaron el honor del equipo español en el Europeo de Praga en pista cubierta con sendas medallas de plata. En una gloriosa tarde de sábado, Pablo Torrijos, del Playas de Castellón, e Indira Terrero, del Valencia Terra i Mar, se colgaron las únicas preseas de un equipo nacional que retrocedió 21 años en el medallero.

El atleta de combinadas Jorge Ureña cerró este domingo la participación valenciana en el heptathlón con un séptimo puesto en un debut en el que aspiraba a más, quizá un podio, que hubiera rozado de haber atinado en la longitud, su prueba fetiche, en la que se quedó en 6,88 m dos semanas después de haber saltado 7,58 m en Antequera. Lo compensó elevando el listón personal en altura hasta 2,04 m el sábado, y con dos marcas personales más ayer domingo, 7.81 en 60 m vallas y 4,80 m en salto con pértiga. Inició la competición con 6.96 en 60 m lisos y con 13,46 m en lanzamiento de peso. El domingo cerró las siete pruebas con un cuarto puesto en 1.000 m, con 2:42.61. En total sumó 5.941 puntos, a 110 de su techo.

«Es una pena lo de la longitud, pero son cosas que pasan porque hay muchas pruebas, pero lo he sabido superar», dijo al finalizar su concurso Ureña, que hace dos semanas rozó el récord de España de Antonio Peñalver (6.062 puntos), que data de hace 23 años. «Intentar competir con las marcas de Peñalver motiva», añadió en declaraciones a Efe el atleta de Onil, que trata de mejorar en disco y pértiga con vistas a romper la barrera de los 8.000 puntos del decathlón. «La pértiga es lo que más se tarda en pillarle el truco», comentó.

NUEVE FINALISTAS

Dos medallas de chocolate

Borja Vivas en peso y Jesús España en 3.000 fueron cuartos, lo que unido a los nueve finalistas llevaron a la selección al puesto decimoctavo del medallero, tras ser quinta en Goteborg 2013.