La nadadora catalana Erika Villaécija, décima clasificada en la prueba de cinco kilómetros de aguas abiertas en los Mundiales de Kazán (Rusia), reveló que sus sensaciones fueron "buenas" aunque lamentó que la húngara Eva Risztov le impidiera continuar en el grupo de cabeza.

"Creo que he nadado bien porque he ido delante todo el rato aguantando los cortes de cabeza de carrera", indicó Erika Villaécija en declaraciones que recoge la Real Federación Española de Natación (RFEN) en su web.

A pesar de que "el agua no estaba como en días anteriores", subrayó, la barcelonesa mantuvo durante gran parte de la prueba sus opciones de medalla. Una posibilidad de la que se alejó de manera definitiva al no coger el último corte.

"Risztov no me ha dejado", explicó.

Por su parte, la gallega María Vilas, debutante en aguas abiertas en una cita mundialista, acusó "los golpes" y las difíciles condiciones del río Kaznka.

"La salida la hice bastante bien pero una vez que empecé a recibir golpes y los giros de las boyas se complicó. Se notó mucho el oleaje y costaba mucho seguir a las demás porque no se ve nada en el agua, no puedes ver ni los pies de delante ni tu propia mano", analizó.

Vigésima cuarta en Kazán, Vilas apuntó: "Como experiencia nueva bastante bien".