Manny Pacquiao sigue siendo noticia fuera de los cuadriláteros y ya no solo por sus desafortunadas declaraciones de la semana pasada en ofensa de los homosexuales ofensa de los homosexuales, sino por su incursión en la política y hasta en el baloncesto.

De hecho, el filipino, que mide 1,66 m., participó este lunes en un partido en su ciudad natal General Santos, al sur de Filipinas, en el que curiosamente lució unas zapatillas Nike a pesar de que la multinacional estadoundiense anunció días atrás que rompió el contrato con él por sus declaraciones hacia los homosexuales.

Pacquiao, gran aficionado al baloncesto, ya debutó profesionalmente como entrenador/jugador en 2014 con el equipo KIA Sorento, con el que ganó la PBA Cup de Filipinas.

La gran estrella del deporte filipino tiene previsto un nuevo combate para el 9 de abril ante Timothy Bradley, pero al mismo tiempo, está centrado también en su carrera política para ser senador, aunque actualmente es ya diputado por la provincia de Sarangani.

Y es que a pesar de perder el llamado combarte del siglo ante Floyd Mayweathercombarte del sigloFloyd Mayweather, Pacquiao sigue siendo un auténtico ídolo de masas en su país.

Además, cabe recordar que Pacquiao ya ha mostrado su interés por una revancha ante Mayweatherrevancha ante Mayweather a pesar de que el estadounidense anunció que quería retirarse tras el combate del siglo. Algo que no cumplió al volver a competir contra el estadounidense de origen haitiano Andre BertoAndre Berto, y que deja abierta la opción, aunque remota, de volver a verlos frente a frente en un ring. Los multimillonarios ingresos de ambos por aquel combate, superiores a los de Messi y Cristiano Ronaldo juntos en un año, hacen que todo sea posible aún.