El senador y campeón filipino del boxeo, Manny Pacquiao, ha presentado ayer ante la Cámara Alta de Filipinas tres propuestas de ley con las que pretende reimplantar la pena de muerte en el país.

La iniciativa del boxeador, elegido senador en los comicios del pasado 9 de mayo, establece la pena capital para los crímenes atroces, incluidos los relacionados con las drogas, según el diario local Manila Bulletin.

El proyecto legislativo surge después de la reunión que el pugilista mantuvo el lunes pasado con el presidente de Filipinas, Rodrigo Duterte, otro partidario de levantar la moratoria que impuso en 2006 la entonces jefa del Estado, Gloria Macapagal Arroyo.

´Duterte realmente quiere que se vuelva a imponer la pena de muerte, y por supuesto, yo también lo quiero', declaró Pacquiao, al tiempo que defendió la campaña contra la delincuencia que impulsa el mandatario.

Más de 500 delincuentes han muerto en Filipinas desde que Duterte ganó la carrera presidencial, en mayo, según datos de los medios locales.

Pacquiao vuelve a ser objeto de polémica por sus ideas políticas tras el enfrentamiento vivido con la comunidad homosexual.